Hoy en día, las ofertas de los bancos en cuanto a hipotecas se refiere están alrededor del Euribor + 2,5%. Este diferencial es una bomba de relojería, sobretodo si tenemos en cuenta que el Euribor es un índice muy variable. Aunque, según lo que asegura Mario Draghi, los tipos de interés no subirán a corto plazo (por lo que tampoco lo hará el Euribor), en lo que a largo plazo se refiere no se puede saber a ciencia cierta qué pasará.

No podemos, ni debemos, olvidar que en 2008 el tipo del Euribor llegó a sobrepasar el 5%, por lo que tener un alto diferencial puede convertir una hipoteca en la peor pesadilla de cualquiera si esto volviera a suceder.

Efectos de la posible subida del Euribor

Pongamos como ejemplo una hipoteca media de 150.000 €, a pagar en 25 años y con un diferencial al tipo medio actual, es decir, 2,5%. Veamos cómo influye la variación del valor del Euribor, tanto en la cuota mensual, como en el coste total que habremos pagado al banco tras el período de amortización:

Euribor (%) Cuota (€/mes) Coste total en 25 años (€) Cuánto pagas de intereses (€)
0.5 711,32 213.395 63.395
1 750,94 225.281 75.281
2 833,75 250.125 100.125
3 921,13 276.339 126.339
4 1012,81 303.843 152.843
5 1108,49 332.546 182.546

Como se puede observar con la tabla, los intereses se pueden inflar sobremanera en el caso de que el Euribor alcance altos valores. Hay que tener mucho cuidado con esto, y con contratar hipotecas que tengan altos diferenciales, porque aunque ahora no supongan un alto porcentaje, pueden ser un buen quebradero de bolsillos de aquí a un tiempo.