Cambiar el aval de tu hipoteca es posible, siempre que el banco esté de acuerdo. La entidad analizará minuciosamente todas las variables a tener en cuenta para saber si el cambio de aval es un riesgo asumible para ellos o no. Además, probablemente tendrás que pagar una comisión de novación.
En definitiva: habla con tu banco. Él, como parte del contrato, tiene la última palabra en esta decisión.
¡Suerte!