La atención de los interesados es una de las fases más importantes de la venta de una vivienda. Es justo en este momento cuando tenemos la oportunidad de que un comprador caiga rendido ante los encantos de nuestro piso. Por esto, no debemos tomarnos a la ligera esta etapa, ya que cualquier error o descuido nos puede hacer perder una ocasión de oro. En este artículo damos tres consejos para gestionar las visitas con éxito.

1. Llevar una agenda para no dejarnos por fuera a un comprador potencial

Si difundimos al máximo la venta de nuestra vivienda y colgamos anuncios en varios portales inmobiliarios es posible que recibamos una avalancha de contactos de interés. Los potenciales compradores nos llamarán, nos enviarán whatsapps o emails o nos harán preguntas a través de la mensajería directa de los portales.

Por esto, debemos ser muy organizados para gestionar los mensajes de todos estos canales de comunicación. Si queremos vender rápido la casa debemos ser ágiles en contestar todas las dudas y, más importante aún, debemos llevar un registro de todas las personas que quieren ver el piso.

En este sentido, es aconsejable llevar una agenda o un cuaderno de notas para ir apuntando los nombres de los interesados y los días y horas que hemos acordado para enseñarles la casa. Esto es esencial, especialmente si tenemos la tendencia a ser un poco despistados. Un plantón o una visita inesperada en un momento inadecuado pueden ser perjudiciales para nuestro objetivo.

2. Recibir a los interesados de día y planificar el tiempo de las visitas

Para tener éxito no basta con llevar un registro y acordar con los interesados la hora de las visitas. Es indispensable que las planifiquemos en días y momentos concretos, teniendo especial cuidado que estas no se solapen entre sí.

Las personas deben poder ver la vivienda con tranquilidad, sin sentir la presión de que hay otra visita esperando que se marchen para visitar la casa. En este sentido, algunos expertos inmobiliarios recomiendan agendar los encuentros dejando, al menos, una media hora de separación entre ellos. Si la casa es grande o tiene muchos espacios, podría ser un poco más de tiempo.

Asimismo, es aconsejable recibir a las visitas de día. La luminosidad de la vivienda es uno de los aspectos mejor valorados por los compradores y si nuestra casa recibe una gran cantidad de luz solar, es un punto a nuestro favor que debemos aprovechar.

3. Preparar la vivienda para que luzca su mejor cara

De nada nos sirve organizar bien las visitas si no preparamos adecuadamente la casa para recibirlas. Por esto, debemos hacer especial hincapié en arreglar la vivienda para que las personas no se lleven una decepción al poner un pie en ella.

 

La limpieza es fundamental, así que debemos fregar a profundidad, incluso en aquellos rincones que no se ven a simple vista. No sabemos si alguno de nuestros potenciales compradores es puntilloso en este aspecto. Además, debemos ordenar todos los espacios y guardar, en la medida de lo posible, todos aquellos objetos que son muy personales. Mientras más pulcra y neutra luzca nuestra casa, más probabilidades tiene de gustar a un mayor número de visitantes.