Las separaciones suelen traernos muchas dudas en relación a los trámites y a la repartición de los bienes de la pareja. Fundamentalmente si queremos vender nuestro piso tras el divorcio. Pero ¿qué ocurre si tenemos una casa que fue comprada antes de casarnos? ¡Aquí te lo contamos!

¿Quién será el dueño de una casa comprada antes del matrimonio?

Una casa que se compra antes de la celebración del matrimonio, en general, es un bien privativo. En otras palabras, le pertenecerá a la persona que lo compró y no se verá perjudicada por el proceso de divorcio. Esto es así independientemente del régimen matrimonial que hayamos escogido (bienes gananciales o separación de bienes).

Sin embargo, existe una excepción que está contemplada en el Código Civil y se da cuando se cumplen estos cuatro requisitos al mismo tiempo:

  • La casa se compró antes del matrimonio a través de un préstamo hipotecario.
  • La hipoteca continuó pagándose luego de contraer matrimonio.
  • El matrimonio se celebró bajo un régimen de gananciales.
  • La propiedad fue o es el domicilio familiar de la pareja.

En este caso, por tratarse de un piso comprado antes de casarse que funcionó como vivienda familiar, la parte abonada durante el matrimonio tendrá carácter ganancial. Es decir que pertenecerá a ambos miembros de la pareja.

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¿Cómo se repartiría la propiedad de una vivienda familiar en régimen de gananciales?

De este modo, una casa de cien mil euros que fue comprada por unos de lo cónyuges antes del matrimonio y, además, este abonó el 50% de la hipoteca antes de la boda y el otro 50% luego de contraer matrimonio en régimen de gananciales, quedaría dividida de la siguiente manera:

  • El cónyuge que compró la vivienda sería propietario del 50% adquirido antes de casarse.
  • El 50% restante pertenecerá a la sociedad de gananciales y se dividirá según lo establecido en la sentencia de divorcio.

Este es un caso excepcional donde tendremos que contar con el consentimiento de nuestra ex pareja para vender un piso comprado antes del matrimonio.