A diferencia de las tarjetas de débito que están asociadas a una cuenta corriente, las tarjetas de crédito nos permiten financiar compras y conseguir liquidez siempre que se necesite. Con el dinero que nos preste la entidad bancaria y a través de estos plásticos será posible fraccionar compras, sacar dinero en efectivo o hacer transferencias a una cuenta corriente. Y aunque no todas las personas lo saben, las entidades ofrecen la posibilidad de pagar sin intereses a fin de mes. Sin embargo, si decidimos pagar en varios meses tendremos que abonar intereses. Y a estos costes habría que añadir las comisiones de mantenimiento o de emisión que muchas entidades cobran a sus clientes. Por eso, antes de contratar una tarjeta de crédito vale la pena fijarse en las condiciones y, de esta manera, evitar malas sorpresas. En este artículo te presentamos algunas de las mejores tarjetas de crédito disponibles actualmente en el mercado y los trucos para evitar pagar comisiones adicionales.

Contrata una tarjeta de crédito sin cambiar de banco

Conseguir una tarjeta de crédito sin trasladar la nómina o los ingresos a otras entidad bancaria es posible. Entidades como WiZink no requiere la apertura de una cuenta ni contratar productos asociados para conseguir una tarjeta. Además, se trata de una buena alternativa si lo que se desea es conseguir mejores ventajas.

Con la tarjeta de crédito WiZink Me es posible obtener una devolución del 3% en las compras realizadas con la tarjeta. Para conseguirlo bastará con seleccionar dos de las cuatro categorías disponibles: moda, ocio, viajes, alimentación. Eso sí, el máximo a remunerar será de 2 euros al año. Todo esto sin dejar de lado que los nuevos clientes que contraten el plástico podrán conseguir un cheque de 60 euros para gastar en Amazon.es, siempre que la tarjeta se use en el primer mes posterior a la contratación.

Vincúlate y quítate las comisiones

Muchos bancos en España suelen solicitar vinculación a los clientes para ofrecer servicios básicos sin costes como el mantenimiento, las transferencias o las tarjetas de crédito. Por eso, antes de comenzar con el proceso de contratación es importante revisar cuáles son los requisitos que pide el banco para eliminar la comisión de mantenimiento de la tarjeta de crédito.

En muchos casos, la entidades tradicionales requieren domiciliar ingresos y contratar productos como préstamos, planes de pensiones o productos de inversión como fondos. Antes de optar por cumplir con las condiciones de la entidad resulta importante tomarse el tiempo de valorar si las condiciones de la tarjeta son lo suficientemente buenas.

Abre una cuenta con poca vinculación

Una posibilidad que también está a la mano y que nos ayuda a evitar los costes adicionales es buscar entidades que requieran poca vinculación. Los clientes de la Cuenta Nómina de ING, por ejemplo, pueden domiciliar la nómina, pensión o prestación de desempleo para obtener tanto tarjeta de débito como tarjeta de crédito sin tener que pagar por ello. Además, los clientes que cumplan con estos requisitos podrán hacer retiradas gratis en hasta 50.000 cajeros en toda España y la posibilidad de tener dos días de descubierto gratis.

Banco Mediolanum tampoco cobra por las tarjetas de crédito o de débito y solo exige domiciliar un salario es superior a 700 euros en su Cuenta Única. Además, el banco ofrece una rentabilidad del 1,75% TIN anual durante dos meses sobre un saldo de hasta 10.000 euros.

Aunque es verdad que en otras entidades no exigen la domiciliación de ingresos para dar tarjetas de crédito, lo cierto es que habrá que pasar por el proceso de contratación de la cuenta. Una vez abierta la cuenta se deberá solicitar la tarjeta de crédito y, al final, la entidad puede decidir no concedernos el plástico.