Para vender un piso es necesario realizar una serie de trámites. La cédula de habitabilidad es uno de ellos. Aunque, este documento no es obligatorio en todas las comunidades. De hecho, sólo se exige para vender una casa en nueve de ellas. Pero ¿cómo puedo realizar esta gestión si en mi región es obligatoria? Si bien cada ayuntamiento dicta sus propias pautas, de manera general, para obtenerla debemos hacer lo siguiente.

1. Averiguar los requisitos en la web u oficina de nuestro ayuntamiento

De momento, solo en Asturias, Baleares, Cantabria, Cataluña, Extremadura, La Rioja, Murcia, Navarra y la Comunidad Valenciana la cédula de habitabilidad es obligatoria para vender, pero como hemos mencionado, los requisitos para este documento varían según la localidad.

Por esto, es aconsejable verificar antes cuáles son los pasos que debemos dar en nuestro ayuntamiento. La mayoría de ellos piden un informe elaborado por un técnico habilitado, pero las webs de algunas comunidades como, por ejemplo, Cantabria, no especifican que este sea un requisito indispensable para obtener la cédula. Dado esto, lo primero que debemos hacer es cerciorarnos de qué es lo que necesitamos para el trámite.

2. Solicitar la inspección del técnico si el informe es obligatorio

Si uno de los requisitos para sacar este documento es la inspección de un técnico debemos buscar a uno para que visite nuestra vivienda. Este lo podemos conseguir a través de los colegios de profesionales de arquitectos o ingenieros de nuestra ciudad o bien en páginas webs especializadas. Aunque, si estamos vendiendo el piso con una inmobiliaria esta se puede encargar de realizar el trámite.

El coste del técnico en este caso vendría incluido en la comisión que le pagamos a la inmobiliaria por la venta del piso. Pero si el asunto es que lo hacemos por nuestra cuenta, contratar a este profesional nos puede costar alrededor de los 120 euros, según la web Habitissimo. No obstante, hay que tener en cuenta que el precio final a pagar variará según la localidad y el técnico elegido.

3. Presentar los documentos vía online o de manera presencial

Una vez que el técnico ha realizado la inspección en la casa, el siguiente paso sería  introducir el resto de recaudos en el ayuntamiento para que el organismo emita la cédula de habitabilidad.

Generalmente, nos piden documentos básicos como la escritura de la vivienda, una copia de nuestro DNI y el abono de la tasa de emisión, pero algunos ayuntamientos piden otros tipo de requisitos. Por ejemplo, en Baleares exigen fotografías de la vivienda objeto de la solicitud y en Asturias solicitan una declaración jurada del propietario, donde este hace constar que no se han alterado las condiciones de habitabilidad de su vivienda.

En este sentido, debemos recopilar los documentos y entregarlos al técnico, ya que este es el que se va a encargar de la gestión al completo. Sus honorarios incluyen la inspección y las tasas administrativas. Aunque, si queremos, también podemos hacerlo nosotros mismos. Este trámite se puede realizar de manera presencial en las oficinas del ayuntamiento o de forma online, pero algunas localidades piden que para hacerlo por Internet debemos contar con el certificado digital o DNI electrónico.