Si estamos pensando en pedir una hipoteca, puede que nos preguntemos cómo evitar que el banco se aproveche de nuestra ignorancia. La realidad es que, aunque la fama les precede, el consumidor está ahora más protegido que nunca gracias a la nueva ley hipotecaria. Por eso, la probabilidad de pagar las consecuencias de la aplicación de cláusulas que no conocíamos es mínima. Aun así, es recomendable mantener los ojos bien abiertos y comparar distintas ofertas. A continuación, haremos un repaso por las 3 medidas de transparencia que los bancos deberán cumplir.

1. Toda la información del préstamo, alta y clara

Aunque no la nueva ley hipotecaria no tiene carácter retroactivo, desde el 16 junio de 2019 las entidades financieras está obligas a informar al detalle sobre sus hipotecas. En concreto, el banco tiene que entregar al cliente la FEIN del préstamo, un documento precontractual con carácter de oferta vinculante, y la FiAE, una ficha en la que se explican las cláusulas más relevantes.

Además, la nueva ley exige que el futuro hipotecado reciba una copia del contrato antes de la firma para poder revisarlo tranquilamente en casa. Y, en el caso de tratarte de un préstamo hipotecario a tipo, la entidad deberá facilitarle un documento adicional con la simulación de las cuotas en varios escenarios.

2. Con la nueva ley hipotecaria no podrás firmar sin entender

Otra de las novedades que nos podrían tranquilizar es que el notario no nos dejará firmar si considera que no entendemos el contrato que tenemos delante y nos ofrecerá asesoramiento gratuito. En la práctica, al menos un día antes de cerrar la operación de financiación deberemos acudir a una notaría y pasar un pequeño test.

Por lo general, estos profesionales se aseguran de que conocemos si estamos contratando una hipoteca fija o variable, comprueban que somos conscientes de la vinculación y las comisiones que figuran en el crédito y que estamos conformes con las condiciones ofertadas por el banco.

Además, los notarios y los registradores no podrán escriturar o inscribir cláusulas consideradas abusivas por el Tribunal Supremo, como por ejemplo el IRPH o la cláusula suelo.

3. El banco no podrá obligarte a contratar otros productos

A diferencia de lo que ocurría hasta la entrada en vigor de la nueva normativa, los bancos no pueden obligar al cliente a contratar productos adicionales para firmar la hipoteca. Esto quiere decir que no podrán imponernos como requisito la firma de seguros, planes de pensiones o tarjetas de crédito de la entidad.

Sin embargo, la ley hipotecaria sí que permite que las financieras introduzcan los llamados productos vinculados. Estos son opcionales y pueden premiar al cliente que los contrate con una rebaja del tipo de interés del crédito. Para poder valorar si merece la pena asumir este coste adicional o aceptar un tipo de interés más caro, la ley obliga a los bancos a entregar dos ofertas: una con el interés bonificado y otra sin bonificar. En esta comparativa es interesante revisar el coste total de la hipoteca.

¡RECUERDA! El seguro de daños obligatorio lo podremos contratar con la compañía que queremos, sin que deba ser necesariamente el banco con el que firmaremos la hipoteca.