Hasta el año 2014, momento de implantación de la SEPA (Zona Única de Pagos en Euros), realizar una transferencia internacional era algo más complejo de lo que es hoy en día, ya que los códigos de las cuentas eran nacionales y no marcaban el país de cada cuenta bancaria, por lo que era imposible saber a qué país correspondía cada número.
Actualmente, gracias a la SEPA, el sistema se ha simplificado, y las cuentas se identifican con una numeración internacional que comparte los mismos criterios en cada país.

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IBAN Y BIC, los dos indispensables en una transferencia internacional

Enviar dinero al extranjero es una operación bastante común y sencilla y si conocemos el código IBAN y BIC de la cuenta bancaria receptora no tendremos ningún problema a la hora de realizarla. Véamos lo que significan estos dos indispensables:

  • El código IBAN ( International Bank Account Number) se compone de los 20 dígitos que conforman nuestra cuenta bancaria, más 4 caracteres que identifican el país y el número de control del IBAN. Este número lo podemos encontrar tanto en la libreta como accediendo a la Banca Online de nuestro banco.
  • El código BIC (Bank Identifier Code) o SWIFT se utiliza en transferencias y operaciones entre bancos de fuera de la Unión Europea. Es el número identificador de nuestra entidad bancaria, y está compuesto por 8 caracteres que informan tanto del nombre de la entidad como de su país y localidad.

¿Necesito algo más para ordenar una transferencia?

A la hora de realizar una transferencia bancaria hay varios datos que son imprescindibles para poder realizarla como:

  • El nombre o razón social 
  • El número de cuenta en la que se cargará el importe de la transferencia, salvo que desee entregar el dinero en efectivo en ventanilla y la entidad lo admita

En el caso de transferencias bancarias internacionales además tendremos que aportar:

  • El número de cuenta del beneficiario en formato IBAN y BIC 
  • El concepto de la transferencia, cuando su importe supere 50.000 euros o su equivalente en divisas
  • Modalidad de repercusión de gastos y comisiones bancarias: OUR, BEN o SHA

¿Quién paga las comisiones?

En el caso de las transferencias internacionales, las entidades bancarias cobran una cantidad por ofrecer sus servicios, según tres tipos de modalidades, que elige la persona que ordena la transferencia:

  • Opción OUR: el que realiza la transferencia (ordenante) se hace cargo de todos los gastos y comisiones y el beneficiario recibe íntegro el importe de la transferencia.
  • Opción SHA: los gastos y comisiones se comparten entre el que recibe la transferencia y el ordenante. El beneficiario recibe el importe de la transferencia menos los gastos y comisiones que su entidad y/o una intermediadora cobre por este servicio, pero no asume los gastos de la entidad ordenante.
  • Opción BEN: el beneficiario se hace cargo de la totalidad de gastos y comisiones. El beneficiario recibe el importe de la transferencia, menos todos los gastos y comisiones de todas las entidades que intervengan.