Precios a la baja, hipotecas muy baratas, una regulación pendiente que podría abaratar los arrendamientos… Durante los últimos meses, el mercado de la vivienda se ha visto afectado por multitud de variables, lo que hace que sea más difícil saber si sale más a cuenta comprar o alquilar un inmueble. Para que podamos salir de dudas, en este artículo calcularemos con qué opción pagaríamos menos dinero cada año y, además, veremos cuál puede ser más adecuada en función de nuestro perfil económico.

Calculamos si es más barato alquilar o comprar

Lo que debemos saber, en estos casos, es cuánto pagaríamos cada mes por un alquiler y cuánto nos costaría una hipoteca para adquirir una vivienda. De este modo, podremos ver qué opción nos saldría, en teoría, más a cuenta.

Para ello, veremos cuánto dinero nos costaría de media cada opción en España. Para el cálculo, usaremos los precios medios del alquiler publicados por Fotocasa (10,64€/m2) y los de venta publicados por el Consejo General del Notariado (1.452€/m2). Partiremos de la hipótesis de que nos interesa una vivienda de 80 metros cuadrados y que tenemos la opción de contratar una hipoteca fija a 30 años con un tipo medio del 1,65% y una financiación del 80% de la compra:

Precio mensual Precio anual
Compra 327,44€/mes 3.929,28€/año
Alquiler 851,20€/año 10.215,40€/año

Como vemos, con la adquisición pagaríamos unos 6.000 euros menos al año. Al precio anual habría que incluir, también el pago del IBI y de otros gastos asociados a la propiedad del inmueble (el seguro de hogar, la tasa de basuras, gastos de comunidad…), pero estos suelen costar unos cientos de euros anualmente.

¡Atención! Para conseguir la hipoteca tendríamos que tener ahorrado el 30% del valor de la vivienda, mientras que para formalizar el alquiler deberíamos pagar uno o dos meses de fianza más los posibles honorarios de la inmobiliaria.

¿Y en ciudades como Madrid o Barcelona?

En ciertas ciudades, sin embargo, los precios de arrendamiento y de venta son mucho más altos que en el resto de España. Dos buenos ejemplos son Madrid y Barcelona, donde vive gran parte de la población de nuestro país. Veamos, por tanto, cuánto costaría cada opción en estas capitales:

Madrid

Según Fotocasa, el precio de venta de las viviendas es de 3.851€/m2, mientras que el de los arrendamientos es de 15,03€/m2. Veamos cuánto pagaríamos siguiendo la hipótesis anterior:

Precio mensual Precio anual
Compra 868,45€/mes 10.421,40€/año
Alquiler 1.202,40€/año 14.428,80€/año

Barcelona

En Barcelona, según Fotocasa, son más altos tanto los precios de venta (4.421€/m2) como los del alquiler (15,46€/m2). Veamos cuánto pagaríamos siguiendo la hipótesis anterior:

Precio mensual Precio anual
Compra 996,99€/mes 11.963,88€/año
Alquiler 1.236,80€/año 14.841,60€/año

Entonces… ¿es mejor comprar que alquilar?

Como hemos visto, arrendar una vivienda sale más caro. Sin embargo, la compra no es necesariamente una mejor opción que el alquiler. Y es que si queremos conseguir una hipoteca para adquirir un inmueble, deberemos cumplir varias condiciones: tener ahorrado el 30% del precio del piso o de la casa, contar con estabilidad laboral y financiera, cobrar un buen salario y tener pocas o ninguna deuda.

La compra, por lo tanto, sí saldría a cuenta si reunimos todos esos requisitos. Así, es una opción adecuada si contamos con los ahorros suficientes para pagar ese 30% de la adquisición, trabajamos en un sector poco afectado por la pandemia y podemos dedicar un máximo del 35% de nuestro sueldo al pago de nuestras deudas mensuales (hipoteca incluida).

El alquiler, en cambio, puede ser una opción más adecuada (o la única) si aún no cumplimos todas esas condiciones: si no tenemos ahorros, si trabajamos en un sector vulnerable ante la covid-19 (hostelería, turismo), etc. Nos saldrá más caro, aunque nos dará más flexibilidad si queremos mudarnos a otro municipio o si pasamos por problemas económicos.

¡Atención! El Gobierno está preparando una regulación del alquiler para contener sus precios, aunque los socios que lo conforman aún no han acordado qué medidas deberían incluirse en la normativa: limitación de las rentas, incentivos fiscales, etc.