Todos los informes sobre el cierre de 2021 datan de un crecimiento generalizado del mercado inmobiliario. Los últimos datos publicados por la Sociedad de Tasación Gesvalt no son la excepción: demuestran que, durante el último trimestre del año anterior, el incremento interanual del precio de la vivienda fue del 3,7%. En cifras concretas, el metro cuadrado cerró el año con una media de 1.449 euros.
Según los expertos, este fenómeno es una respuesta a las contracciones que se observaron en los trimestres anteriores. Y aunque estiman una estabilización del precio de la vivienda a lo largo del próximo ejercicio, también advierten que, en un escenario tan cambiante como el actual, debemos estar atentos a las posibles modificaciones, tanto legislativas como de preferencia de la demanda.
Este, sin embargo, no es el único reto para el mercado de la vivienda. Aspectos como la inflación, el aumento en los costes de producción, la recuperación de la economía o la nueva ley de vivienda marcarán la deriva del mercado residencial durante los próximos doce meses.
Ley de vivienda
La ley de vivienda ya es un punto central en la agenda del Real Estate y será, probablemente, uno de los desafíos más relevantes de 2022. Al respecto, la tasadora prevé que, a priori, la afectación de esta normativa no será generalizada, “ya sea por cuestiones de gobernanza de las autonomías o por las propias condiciones fijadas en la ley para la determinación de las zonas tensionadas”.
Así y todo, consideran que será necesario analizar aquellos mercados locales en los que sí se aplique, para evaluar cómo interfiere con la evolución natural de los precios del alquiler y la compraventa.
Transformación digital
Otro aspecto en el que el mercado residencial debe incidir este 2022 es la transformación digital. Y es que la pandemia aceleró la digitalización de los procesos en muchos mercados y, en palabras de la tasadora, el inmobiliario no puede quedarse atrás.
“Las promotoras e inmobiliarias deben buscar nuevas alternativas para captar clientes y ser capaces de realizar ciertos procesos sin intervención física. La firma telemática de hipotecas, la gestión profesionalizada de potenciales compradores y arrendatarios apoyados en el big data, el uso del machine learning para predecir la demanda o las visitas virtuales son aspectos en los que debemos avanzar en los próximos meses”, aseguran.
En definitiva, 2022 promete ser un buen año para el mercado inmobiliario. No obstante, las tendencias podrían cambiar en función de las nuevas normativas y la evolución en la demanda de los consumidores. En HelpMyCash seguiremos acompañándote para que estés al día con las novedades y puedas tomar las mejores decisiones al momento de vender tu piso.
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