Si tenemos un piso en propiedad es posible que en algún momento de nuestras vidas nos planteemos venderla. A veces, esta decisión está motivada por motivos personales: nos casamos, la familia crece, los hijos se van de casa, etc. Otras veces, nos movemos por la necesidad de querer un inmueble en mejores condiciones. De hecho, debido al confinamiento y a raíz de la pandemia los españoles están cada vez más interesados en cambiar de vivienda. Según un estudio realizado por Fotocasa, solo en junio de 2020 las visualizaciones de anuncios aumentaron en un 76%. Pero ¿cuáles son los primeros pasos que debemos dar si estamos pensando vender nuestra casa? A continuación, explicamos las tres primeras cosas que tenemos que hacer, una vez tomada la decisión.
1- Investigar el mercado para fijar el precio
La fijación del precio es el punto de partida para vender una casa. En esta etapa es fundamental investigar cómo está la situación del mercado en este momento y cuánto dinero podemos pedir por el piso. ¿Y cómo podemos saber esto?
Para averiguar qué precio podemos fijar a nuestra casa debemos valorar nuestra vivienda a través de diferentes medios. En primer lugar, podemos utilizar las muchas herramientas de tasación online gratuitas que existen. Estas son muy fáciles de usar y nos arrojan de forma instantánea una estimación del precio de nuestro piso. Eso sí, cada plataforma nos puede dar valores muy diferentes entre sí, ya que usan diferentes métodos y medidas para hacer el cálculo. Por esto, no debemos dejarnos llevar por una sola, sino hacer muchas.
También, es aconsejable que le pidamos una valoración a varias agencias inmobiliarias que trabajan en nuestra zona (tanto online como tradicionales). Estas tienen un conocimiento profundo de la zona y saben con qué rapidez se puede vender un piso en nuestro barrio. Hay que tener en cuenta que algunas agencias cometen el error de darnos un precio demasiado alto para que las contratemos, así que debemos entrevistar a, al menos, tres de ellas. No debemos preocuparnos porque estas nos pueden hacer la valoración gratis y sin compromiso. Aunque, este ejercicio también nos puede servir para valorar su oferta de servicios.
Además, para tener una visión más amplia del mercado, podemos mirar los precios de los pisos parecidos al nuestro (del barrio) que estén anunciados en los portales inmobiliarios. Así podemos saber a qué importe venden nuestros vecinos y la competencia que tenemos. Claro está, que estos son los precios de oferta de las viviendas, no a los que realmente se venden los pisos. Estos suelen bajar durante la negociación con el comprador. Así que debemos usar estos importes sólo como una guía.
¿Y qué hacemos con toda esta información? Una vez realizados todos estos ejercicios tenemos suficiente información para fijar un precio de salida. Es aconsejable realizar un rango con todos los precios obtenidos, quitar los valores muy extremos (por lo alto y por lo bajo) y elegir uno que esté dentro de los importes medios.
Importante: Si tenemos prisa por vender el piso deberemos fijar un precio ajustado, que tienda más hacia el lado del bajo del rango. De lo contrario, podríamos tardar más de lo que queremos en cerrar el negocio.
2- Decidir si queremos vender con o sin inmobiliaria
Otra de las cosas que debemos hacer en las fases iniciales de la venta es decidir si queremos vender la casa entre particulares o si, por el contrario, contratamos los servicios de una agencia inmobiliaria.
En el primer caso, deberemos hacernos cargo de todas las gestiones para lograr la venta: anuncios, documentos, visitas, etc. En el segundo caso, una agencia se encargará de hacer las tareas por nosotros. Aunque, hay que tener en cuenta que existen dos tipos de inmobiliarias:
- Las agencias tradicionales: se encargan de toda la gestión de la venta y, a cambio, nos cobran una comisión inmobiliaria que oscila entre un 3% y un 7% del precio de la casa.
- Las inmobiliarias online: son empresas que gestionan la venta de nuestra casa totalmente online (no suelen atender clientes en oficinas físicas) y ofrecen varios tipos de paquetes de servicios, de diferentes precios, que podemos contratar según nuestras necesidades. Tienen precios que van desde los 1.000 euros hasta los 5.000 euros, según el paquete contratado y la forma de pago (los más baratos se pagan al inicio y los más costosos con la venta).
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3- Averiguar con tiempo qué documentos necesitamos
Si decidimos vender la casa con una inmobiliaria esta se podrá encargar de la gestión de todos los documentos que necesitamos para vender el piso. Pero, si optamos por vender por libre o hemos contratado un paquete de una inmobiliaria online que no nos incluyen los documentos deberemos tramitarlos por nuestra cuenta. Eso sí, la agencia online nos podrá indicar con detalle cuáles son los papeles exigidos y nosotros solo tendremos que gestionarlos.
Pero si no contamos con asesoramiento es aconsejable investigar con tiempo qué documentos son obligatorios en nuestra comunidad, en qué organismos o cómo se obtienen y cuánto tiempo pueden tardar. Así nos podemos planificar para tener a mano los papeles a tiempo, ya que si encontramos un comprador y no hemos hecho los trámites no solo corremos el riesgo de que se retrase la venta sino , incluso, de perder al comprador.
Importante: algunos documentos como, por ejemplo, la cédula de habitabilidad se deben presentar ante la Administración para que tenga validez y cada comunidad maneja diferentes tiempos para su emisión. Así que es importante ser espabilados e investigar con tiempo sobre todos los trámites. ¿Quieres saber qué documentos se necesitan para vender una casa en España? Haz clic en el botón y te contamos de manera general cuáles son, cómo se consiguen, qué precio tienen y cuánto pueden tardar.
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