Cuando estás buscando contratar un préstamo das una gran cantidad de pasos. Comparar, rellenar las solicitudes de las ofertas que más te gustan, visitar diferentes oficinas para preguntar condiciones, entregar la documentación una y otra vez y esperar una respuesta. Todo ello para que, en muchas ocasiones, recibas un “no” por parte del banco sin más explicación que un “su perfil no cumple con los requisitos establecidos” o “nuestro departamento de análisis no ha dado el visto bueno”. Pero, ¿por qué los bancos no dicen exactamente el motivo por el que deniegan el préstamo? La razón es simple: la seguridad.

La seguridad, el por qué no se comunica la denegación del préstamo

La razón por la que los bancos no comunican las razones por las que deniegan un préstamo a una persona es la seguridad. Si comunicasen exactamente los motivos por los que un préstamo ha sido rechazado, abrirían la puerta a fraudes. En concreto, a posibles estafadores capaces de crear el “perfil del prestatario perfecto” con el cual podrían conseguir financiación sin levantar sospechas y obtener préstamos personales online con usuarios falsos.

Este es el principal argumento por el que, si tu banco te ha denegado un crédito, no te comunique específicamente la razón.

¿Cuáles son las posibles razones por las que me deniegan un préstamo?

Lo que también debes saber es que si han denegado tu solicitud, aunque no te digan el motivo específico, es porque no cumples con alguno de sus requisitos. Requisitos, por cierto, que variarán de una entidad a otras, aunque en la mayoría de casos se suelen fijar en los mismos aspectos. Por ello, en la siguiente lista puedes ver las principales razones por las que pueden rechazar tu perfil:

Según nuestro perfil

  • Salario: suele ser la razón más común. Es decir, que tus ingresos no son considerados como suficientes para hacer frente a la deuda que contraigas con el crédito y que el pago de las cuotas mensuales pueda suponer un desequilibrio para tu economía.
  • Gastos fijos: tener muchos gastos fijos (alquiler, clases, gastos, etc.) también es motivo de rechazo. Generalmente, si destinas más del 60% de tus ingresos a este tipo de gastos, es muy posible que denieguen tu solicitud.
  • Edad: si eres muy joven (menores de 25 años) o muy mayor (mayores de 60 años), es probable que tu edad sea considerada un “factor de riesgo”. Por ende, el banco puede no aprobar operaciones de financiación apoyándose en este hecho.
  • Falta de ahorros: según el tipo de proyecto, no siempre te costearán el 100% del mismo, como sucede con las hipotecas. Por ejemplo, en ellas, lo más común es que tú tengas que abonar un 20% del coste aproximadamente (también sucede con los préstamos coche, por ejemplo). Así que si no cuentas con ahorros, es un factor más en tus contra.
  • Tipo de contrato: si tienes un contrato temporal que acabará antes de que venza el plazo de reembolso del crédito, es posible que el banco no apruebe tu solicitud. El motivo es el riesgo de que te quedes sin ingresos antes de devolver el crédito.

Según el préstamo que busques

  • Cantidad solicitada: íntimamente relacionada con tu salario, si has solicitado una cantidad poco coherente con tus ingresos, tus posibilidades mermarán.
  • Finalidad: para qué utilices el préstamo también influirá. Quizás para una reforma (algo intangible) no te prestarían dinero, pero sí lo harían para la compra de un coche, que es un bien físico.
  • Falta de antigüedad: si eres nuevo cliente en la entidad y no conocen tu comportamiento como prestatario, es posible que tengas que esperar entre tres y seis meses.
  • Falta de vinculación: aunque es la menos común, podría ocurrir que, si no tienes la nómina domiciliada o no contratas otros productos, el banco deniegue tu solicitud de crédito. Por ejemplo, en el caso de los préstamos de Cofidis, no necesitas ser cliente con antigüedad ni contratar vinculación para poder acceder a su financiación.
  • Tener otros préstamos: si tenemos tarjetas de crédito, hipotecas u otros préstamos, tanto con el mismo banco como con otro, también podrían no aceptar nuestra solicitud.

Analizando tu perfil según estas directrices, podrás tener una idea más o menos aproximada de por qué no te conceden un crédito. No obstante, ten en cuenta que suele ser una mezcla de dos o más variables según haya analizado el departamento de riesgo de la entidad.