No es ninguna novedad que los ladrones aprovechen épocas vacacionales para incrementar su actividad. Las aglomeraciones y la despreocupación de los turistas facilitan su tarea. Para evitarlo, es necesario mantenernos siempre alerta, y no solo en la calle, también cuando vayamos a hacer uso de una de nuestra tarjeta de crédito. Y es que en 2017 se registraron cerca de medio millón de usos fraudulentos de tarjetas, según datos del Banco de España. Eso sí, tampoco hay que alarmarse, ya que esta cifra representa menos del 0,02% del total de operaciones que se han hecho con ellas. Aun así, y si no queremos ser una de las víctimas, debemos tener en cuenta varios aspectos que detallamos a continuación.
3 trucos para evitar ser víctimas de un fraude con nuestra tarjeta
No todas las malas experiencias se producen de la misma forma. Según indica la Memoria Anual sobre vigilancia de sistemas de pago, el 67% de operaciones fraudulentas se producen en datáfonos manipulados, el 29% en operativa remota (compras online) y el resto en los cajeros. Vistos cómo se distribuyen los riesgos sobre nuestra tarjeta, definimos cada peligro y proponemos un truco para evitar ser víctimas de un uso fraudulento.
Peligro 1: el TPV falso
Puede ocurrir en comercios donde el datáfono haya sido sustituido por uno falso sin que el propietario del establecimiento lo sepa.
Truco
Podemos comprobar que el TPV es legal metiendo la tarjeta de crédito, ya que los datáfonos de verdad permiten que esta entre justo hasta la mitad. Otra opción, si dudamos del aparato en cuestión, es meter un pin incorrecto; si lo acepta, es que se trata de una falsificación y deberemos llamar a la policía.
Peligro 2: las compras online
Hay páginas web que pueden ser estafas en las que compremos un producto, lo paguemos, este jamás nos llegue y perdamos el dinero.
Truco
Para evitarlo solo tenemos una vía: comprar en páginas de confianza. ¿Y cómo podemos saber que lo son? Es muy fácil. Si la URL comienza con “https” y pone justo delante “Es seguro”, se trata de una web de la que podemos confiar. Además, siempre queda la posibilidad de utilizar tarjetas prepago (para que no puedan vaciar nuestras cuentas más allá del saldo que tengamos) o las tarjetas virtuales, como la que incorpora la Cuenta ON de Bankia.
Peligro 3: los cajeros manipulados
Hay distintos tipos de fraudes relacionados con los cajeros: manipular el teclado, obstruir la ranura por donde sale el dinero o incluso sufrir un intento de robo.
Truco
Llevar a cabo algunas medidas de seguridad antes de sacar dinero: revisar el teclado y la ranura de la tarjeta de crédito para ver que son los originales. Una vez vayamos a realizar la operación, tenemos que tapar siempre el código pin.
La seguridad en las tarjetas, cuestión de hábitos
Al mismo tiempo, una buena práctica es cambiar el número secreto de la tarjeta de crédito o débito cada cierto tiempo y echar un vistazo a los datos de las operaciones que hayamos hecho de vez en cuando. De esta forma podremos detectar -en caso de que se produjeran- cuanto antes operaciones fraudulentas y evitaríamos males mayores.
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