Agosto es, junto con Navidad, la época del año donde los gastos más aumentan. Durante la época estival, de acuerdo con un estudio realizado por American Express, los españoles gastaremos de media 2.070 euros. Aunque el porcentaje de gasto depende de la edad (los millennials y la Generación Z son los que gastarán menos), siendo los adultos de entre 38 y 50 años quienes gastarán más cantidad. Con el gasto por las nubes somos muchos los que optamos por líneas de crédito para financiar los gastos estivales. Por ello desde HelpMyCash te damos tres consejos para que, si decides financiar tu verano, lo hagas de manera responsable.

1. Comparar, la clave para elegir la mejor línea de crédito

Si estamos decididos a financiar parte de nuestros gastos de agosto, lo primero que debemos hacer es comparar entre varios productos y elegir el que mejores condiciones nos ofrezca. No basta con contratar el primer producto que nos ofrezca nuestro banco, sino que es aconsejable comparar, al menos, tres ofertas distintas. Esto nos ayudará no solo a encontrar la línea de crédito con mejores condiciones, sino también a tener un mayor poder de negociación con nuestro banco si preferimos no cambiarnos de entidad.

La línea de crédito Crédito Directo de Cofidis es una de las pocas que permite poder contratarla sin cambiar de banco, permitiéndonos obtener las ventajas de este producto de financiación sin tener que renunciar a las ventajas que nos ofrece nuestro banco de toda la vida:

Línea de crédito Cantidad Coste Plazo de reembolso Me interesa
Crédito Directo de Cofidis De 500€ a 4.000€ 2,12 % TIN mensual (24,51 % TAE) 13-41 meses
Solicitar

Según su coste, la cantidad que nos ofrezca o la forma de reembolsarlo que tengamos podremos decantarnos por un producto u otro de acuerdo con nuestras necesidades económicas personales.

2. Controlar los gastos, los plazos y las cuotas

Una vez tenemos elegida la línea de crédito perfecta para nosotros el siguiente paso es organizar. Para utilizarlas de manera responsable debemos tener en cuenta varios aspectos de este tipo de productos.

  • No pagar todos los gastos a crédito: nunca es aconsejable realizar todas las compras de verano con una línea de crédito, ya que esto implicaría vivir con «dinero de mañana» que deberemos reembolsar en un futuro próximo junto con los intereses. Por ello lo mejor es organizar qué gastos pagaremos con este método de financiación y cuáles los pagaremos con nuestros ahorros.
  • Controlar la forma de pago: cuota fija, cuota porcentual, pago total diferido…las líneas de crédito ofrecen varias formas de pagar las compras que realicemos, por lo que antes de comenzar a financiar las compras es conveniente saber qué método de pago está por defecto elegido y cuál es el que nos conviene más después de analizar nuestra situación económica y los gastos que planeamos pagar a plazos.
  • Fijarnos en el total, no solo en las cuotas: además de saber qué cuota pagaremos y durante cuánto tiempo. No es aconsejable fijarnos solamente en la mensualidad que deberemos reembolsar, sino que también es importante saber cuánto nos costará financiar las compras que realicemos.

3. Realizar una gestión activa de la línea de crédito

Por último, y no por ello menos importante, saber cuánto tiempo estaremos pagando es otro de los puntos clave para utilizar responsablemente una línea de crédito. Al elegir el pago porcentual, por ejemplo, o realizar compras cada mes con este producto el plazo se irá alargando de acuerdo con el capital a deber. Además, estos productos están diseñados para financiar ciertas compras concretas, no como una forma de financiación habitual.

De esta manera, cada vez que utilicemos la línea de crédito para pagar una compra deberemos volver a pasar por el punto dos y analizar qué forma de reembolso será la más beneficiosa para nosotros según la cantidad que debamos devolver y nuestra situación financiera personal.