Los préstamos para autónomos también se consiguen con créditos a fondo perdido

Hacerse trabajador por cuenta propia es un paso profesional que pocas personas pueden dar sin recurrir a préstamos para autónomos que les permitan montar su propio negocio. Además, crear una empresa desde cero es un proyecto arriesgado para el que no todos las entidades están dispuestas a prestar dinero, especialmente si necesitamos acceder a cantidades elevadas. Si las empresas no aprueban nuestra solicitud, existen instituciones que conceden créditos a fondo perdido y que pueden ser realmente atractivos si es nuestra primera vez como emprendedores.

¿Qué son los préstamos a fondo perdido?

Los préstamos a fondo perdido son un apoyo económico por parte del Gobierno hacia los emprendedores para que lleven a la práctica su idea de negocio si no disponen del capital necesario. Se aprueba mediante concurso y entre sus ventajas destacan que no se generan intereses ni tampoco pagamos comisiones. Por lo tanto, no tenemos que sumar costes adicionales además del importe que necesitemos. El objetivo que persiguen estas instituciones con estas ayudas es que se creen más empresas en nuestro país que paguen impuestos y que, por lo tanto, engrosen las arcas del Estado. Además, también son una forma de generar empleo.

¿Cómo puedo conseguir un crédito a fondo perdido?

Como ya hemos indicado con anterioridad, estas ayudas se conceden mediante un concurso público que consta de los siguientes tres filtros:

1. Normativo. En este primer filtro tendremos que asegurarnos de que todo el papeleo de nuestra empresa está en orden para que el organismo compruebe su veracidad.

2. Técnico. Con nuestro plan de empresa, la institución analizará la viabilidad tanto técnica como financiera de nuestro proyecto para conocer los riesgos a los que se expone al concedernos el préstamo a fondo perdido.

3. Selección. En este último filtro, la institución nos asignará los créditos que consideren según el resultado del análisis de los dos apartados anteriores. Esta puntuación será con la que nos clasifiquemos con respecto a otros solicitantes para obtener el subsidio.

Aunque solo devolveremos el dinero en el caso de que así aparezca en el acuerdo que firmaremos con la institución, el organismo revisará que el crédito se utiliza realmente para esta finalidad. Por lo tanto, debemos tener al día los estados de cuenta y las facturas con todos los gastos que se han generado.

Si no me conceden uno, ¿qué opciones tengo?

Aunque la opción de solicitar créditos a fondo perdido resulta realmente atractiva, un aumento de las solicitudes o nuestro plan de negocio pueden ser algunos motivos por los que no podremos acceder al capital. Si nos vemos en esta situación, existen  otros préstamos para autónomos en el mercado. No obstante, en este caso tendremos que añadir el coste que se generará y, en algunos casos, comisiones de apertura o estudio.

Además, podemos encontrar desde minicréditos hasta grandes cantidades acudiendo a préstamos con garantía hipotecaria. Por lo tanto, dependerá del dinero que necesitemos que nos decantemos por uno o por otro. Si no tenemos ingresos pero sí una vivienda sin cargas o con la hipoteca pagada en un 80 %, estos últimos pueden ayudarnos a crear o impulsar nuestro negocio. Las condiciones que presentan son las siguientes:

No obstante, dependerá del tipo de inmueble y de la cantidad que necesitemos conseguir la financiación para nuestro negocio. Los préstamos con garantía hipotecaria solo nos van a permitir acceder a un 40 % del valor de tasación de la vivienda. Sin embargo, sus requisitos son más flexibles. En el caso de que no queramos aportar nuestra propiedad como garantía de pago, las entidades bancarias tradicionales también son una vía para conseguir préstamos para autónomos.