La opción más barata para cambiar divisas, ¿banco, casa de cambio o tarjeta?

¿Vas a viajar a un país con otra moneda estas vacaciones? Si tienes pensado cambiar euros a otra moneda en tu banco, debes saber que seguramente pierdas un importe considerable al cambio. ¡Consejo! Antes de cambiar divisas, los expertos de HelpMyCash recomiendan revisar el tipo de cambio oficial, que podremos encontrarlo fácilmente en Google o a través de aplicaciones como la del portal XE. Además, debemos desconfiar de la publicidad cero comisiones, seguramente vayan a cobrarnos un sobreprecio en el tipo de cambio. En este artículo, te contamos las claves para perder lo mínimo al cambiar divisas:

La tarjeta: la clave para no perder dinero

Retirar efectivo a través de un cajero en el extranjero es la opción más barata de conseguir cash en otra divisa. Los tipos de cambio que aplican Visa o Mastercard son los más competitivos y podremos consultar en Internet la diferencia con el tipo oficial.

¡Cuidado! Los bancos suelen añadir una tasa, la comisión por cambio de divisas, que suele ser del 3%. Además, pueden cobrarnos entre un 4 y un 4,5% por retirada de efectivo en un cajero ajeno. De todas formas, siempre va a ser más barato pagar en comercios con la tarjeta de un banco que nos cobra comisiones, que conseguir billetes en la entidad y pagar en efectivo en el destino.

¿Se pueden eliminar las comisiones de las tarjetas?

Sí. La solución es abrir una cuenta bancaria en un banco fintech o tradicional que ofrezca una tarjeta con buenas condiciones al operar en otra divisa. De esta manera, tanto al pagar en otra moneda como al retirar efectivo, conseguiremos suprimir o rebajar estas tasas y pagar el tipo de cambio más cercano al oficial. A continuación, mostramos tres cuentas con tarjetas para viajar:

Cambiar divisas en el banco o en casa de cambio

Comprar billetes extranjeros en los bancos es una de las opciones más caras para cambiar divisas, y es que pueden aplicarnos una comisión de entre el 1 y el 3% con un mínimo que va desde los 6 euros hasta los 30 (comisiones que aplican Santander, BBVA o CaixaBank). Además de esta comisión, el banco aplicará su propio tipo de cambio, que suele llevar un sobrecoste.

Para reconocer el importe que nos cobran de más, podemos comparar el tipo de cambio oficial con el de los bancos. Algunas entidades publican estos datos en su página web, mientras que otras nos los facilitarán llamando por teléfono o acudiendo a una oficina.

Las casas de cambio, al igual que los bancos, pueden parecer una opción cómoda, sin embargo, también es cara. No suelen aplicar comisiones, pero, ojo, los tipos de cambio siempre van a llevar un sobreprecio. Por ejemplo, si cambiamos dinero en una casa de cambio ubicada en el aeropuerto, pueden cobrarnos un sobrecoste superior al 15%. Salvo que sea por una urgencia (como coger un taxi en el destino desde el aeropuerto), no recomendamos cambiar grandes cantidades usando esta opción.

Bancos como ING, Self Bank o EVO Banco tienen acuerdos con casas de cambio para ofrecer a sus clientes el servicio de cambio de monedas. Estos podrán recibir las divisas en casa o en una oficina de Correos entre uno y cuatro días hábiles. También, dan la opción de recogerlas en el aeropuerto, aunque puede salir más caro.