Debido a la pandemia, los bancos se han visto obligados a endurecer los criterios para conceder préstamos hipotecarios. Y hay un perfil de cliente que se ha visto especialmente afectado por esta menor flexibilidad: el que busca hipotecas para financiar hasta el 100% de una vivienda. Según el Banco de España (BdE), la concesión de estos productos ha caído en picado durante el primer trimestre de 2021; una tendencia que ya empezó a observarse el año pasado.

¿Por qué se dan menos préstamos de más del 80%?

En concreto, solo el 8,9% de las hipotecas concedidas durante el primer trimestre financiaban más del 80% del valor del inmueble adquirido, según los Indicadores del mercado de la vivienda del BdE. Esto supone una bajada de 0,5 puntos porcentuales respecto al cuarto trimestre de 2020 y una reducción de 3,2 puntos respecto a 2019.

Y ¿cómo se explica esta bajada? Por la necesidad de la banca de reducir el riesgo de sus operaciones para sortear la pandemia. Las hipotecas al 100% tienen un mayor riesgo de impago, así que muchas entidades han preferido conceder menos productos de este tipo para no sufrir problemas de impagos en el futuro.

En qué casos aún es posible conseguir hipotecas al 100%

Aun así, como hemos visto, hubo un pequeño porcentaje de hipotecados que pudo financiar más del 80% del valor de su nueva vivienda. Eso demuestra que todavía hay bancos que dan estos productos, pero ¿en qué casos lo hacen? Lo vemos a continuación:

  • Si se tiene un perfil excelente: por ejemplo, si se es funcionario o joven con unos ingresos muy elevados y un trabajo en un sector al alza (informática, tecnología, etc.). En estos casos, como el riesgo de la operación es menor, los bancos están más dispuestos a dar hipotecas del 100%.
  • Si se pueden aportar garantías extra para dar más seguridad a la operación: el aval de los padres, otra vivienda libre de cargas… Banco Santander, por ejemplo da hasta el 95% a jóvenes que aporten el aval de los padres.
  • Si se adquiere una vivienda que pertenezca al banco: entidades como Bankinter o Liberbank prestan todo el dinero necesario para adquirir uno de sus pisos embargados.

En cualquier caso, siempre es más sencillo comprar un inmueble con pocos ahorros si se contrata a un bróker hipotecario. Este profesional puede negociar la concesión de estas hipotecas con un mayor porcentaje de éxito y con más rapidez. Podemos contactar con varios si pinchamos sobre el siguiente botón:

Ojo: comprar una vivienda sin nada ahorrado es casi imposible

Ahora bien, aunque el banco nos preste todo el dinero necesario para adquirir la vivienda, aún deberemos tener ahorros para pagar los gastos de formalización de la compraventa: impuestos, honorarios del notario y del registrador y coste de la gestoría. En conjunto, estos cuestan un equivalente al 10% del valor del inmueble.

Prácticamente ningún banco financia estos gastos, así que tendremos que pagarlos de nuestro bolsillo. Únicamente nos libraremos de abonarlos si podemos aportar otra vivienda como garantía de la hipoteca, en cuyo caso es posible que la entidad acepte cubrirlos con el importe del préstamo.

¡Atención! No dediques más del 35% de tus ingresos mensuales netos a pagar las cuotas de la hipoteca. Si te saltas este límite, las probabilidades de sobreendeudarte serán mucho mayores.