Por fin tenemos fumata blanca. Tras una semana de deliberación, la banca ya ha preparado su propuesta para ayudar a los titulares de hipotecas variables que no puedan pagar sus cuotas por la subida del euríbor. Las principales asociaciones bancarias (AEB, CECA y UNACC), según Efe, plantean alargar el plazo de estos préstamos si su mensualidad, después de revisar el interés con el nuevo valor del euríbor, se encarece un 30% o más. Así, la cuota bajará y el titular podrá pagarla con más facilidad.

Pero ¿cuánto te bajará la cuota si te acoges a esta medida? ¿Y qué requisitos habrá que cumplir para que tu banco te la aplique? En este artículo resolveremos las principales dudas sobre esta propuesta y te explicaremos, también, qué otras alternativas tienes si no cumples las condiciones para que te alarguen el plazo.

¿Cómo te ayudará esta medida si tienes una hipoteca variable?

Pero antes de ir al meollo del asunto, conviene poner un poco de contexto. Como ya sabrás si tienes una hipoteca variable, el euríbor, que es el índice con el que se calcula tu interés, se ha disparado este año: empezó en negativo y en septiembre ya va por el 2,233%. Es decir, que si se te revisa ahora el interés (o en los próximos meses), pagarás unas cuotas mucho más altas, lo que te puede generar un problema económico importante.

Para adelantarse al problema, el Gobierno pidió a la banca que elaborara una propuesta para ayudar a los hipotecados a tipo variable que no podrán pagar sus cuotas por culpa del euríbor. Y las entidades ya han puesto una medida encima de la mesa: alargar el plazo si la mensualidad, tras la revisión del interés, sube un 30% o más. Al saldarse la deuda en más tiempo, el importe de las mensualidades será más asequible, aunque habrá que pagar más en intereses a la larga.

De momento, sin embargo, no se sabe cuánto se podrá alargar este plazo. Lo que sí ha trascendido, según Efe, es que la medida se recogerá en un nuevo Código de Buenas Prácticas al que te podrás acoger si cumples sus requisitos (te los contamos más abajo).

Ejemplo práctico: ¿cuánto puede rebajarse tu cuota?

Pongamos, por ejemplo, que tienes una hipoteca variable pendiente de 180.000 euros, con un plazo de 25 años y un interés de euríbor más 1% que se revisa con el valor que este índice registra en septiembre. Antes de la revisión, tu cuota es de 639,03 euros, pero tras actualizarse tu tipo variable, pasarás a pagar una mensualidad de 875,55 euros, que es un 37% más cara.

Para casos como este, la banca propone alargar el plazo para reducir la cuota que pagarás tras la revisión. Por ejemplo, si se prolonga la devolución hasta los 30 años (cinco años más), la mensualidad se reducirá hasta los 781,69 euros, que son 93,86 euros menos al mes que los que tendrías que pagar si no se te aplicara la ayuda.

Requisitos para alargar el plazo de las hipotecas variables

Esta medida está pensada para la gente que tendrá problemas para pagar su hipoteca variable; no para todo el mundo. Estos son los requisitos que tendrás que cumplir para acogerte a ella:

  • Haber contratado tu hipoteca variable a partir del año 2012, para la compra de tu vivienda habitual.
  • Que las cuotas te suban un 30% o más después de que se te revise el interés con el valor actualizado del euríbor.
  • Que el importe de la cuota tras la revisión se “coma” al menos el 40% de tus ingresos familiares, es decir, de los ingresos conjuntos que recibís los habitantes de tu hogar.
  • Que tus ingresos familiares no superen tres veces el IPREM anual en 14 pagas. Es decir, que en tu casa no podéis cobrar más de 24.318,84 euros al año, que son 1.737,06 euros al mes en 14 pagas o 2.026,57 euros en 12 (brutos).

Las asociaciones bancarias calculan que alrededor del 15% de los titulares de hipotecas variables cumplirán estos requisitos y podrán beneficiarse de esta medida.

¿Qué puedo hacer si no cumplo estos requisitos?

Pero ¿qué pasa si no cumples estos requisitos y ves que no llegarás a pagar las cuotas? Afortunadamente, tienes otras opciones más allá de la nueva medida propuesta por los bancos. Veamos qué puedes hacer según tu perfil:

  • Tu hipoteca es anterior a 2012, pero cumples los otros requisitos. En este caso, puedes acogerte al Código de Buenas Prácticas Bancarias original, con el que podrás beneficiarte de medidas como una carencia de capital de cinco años, una prolongación de tu plazo o una rebaja de tu interés.
  • No cumples los otros requisitos sobre los ingresos o la subida de la cuota. En este caso, te aconsejamos negociar con tu banco para ver si puede aplicarte voluntariamente alguna de las medidas que hemos comentado.

Además, puedes llevar a cabo otras acciones para resolver tu problema: tratar de reducir tus gastos, vender la vivienda… Te las contamos todas en esta página: qué hacer si no puedo pagar la hipoteca.