¿Quién diría que dos productos que sirven para el ahorro por igual pudieran tener tantas diferencias? Los expertos de HelpMyCash han buscado las siete diferencias y las han encontrado. En este artículo, desvelamos cuáles son las diferencias para ayudar a entender mejor cómo son las cuentas de ahorro y los depósitos a plazo fijo y poder elegir el producto más acorde a nuestro perfil:

Las 7 diferencias entre cuentas de ahorro y depósitos a plazo fijo:

Aunque el fin sea el mismo, estos productos de ahorro tienen particularidades y características distintas. Ninguno de los dos es mejor o peor, puesto que ambos son buenas alternativas con rentabilidad y sin riesgo. Estas son sus diferencias:

1 La rentabilidad

  • Depósitos: suelen ofrecer un interés superior. La TAE media de los 10 depósitos a un año con mejor rentabilidad actualmente es de 0,77%.
  • Cuentas de ahorro: el interés suele ser más bajo que en los depósitos. La TAE media de las 10 mejores cuentas de ahorro es del 0,45%.
2 El pago de intereses

  • Depósitos: lo más común es recibir los intereses cuando finaliza el plazo, aunque pueden haber excepciones.
  • Cuentas de ahorro: podemos recibir los intereses de forma mensual, trimestral, anual… Dependiendo del producto y la entidad.
3 El plazo

  • Depósitos: tienen un plazo establecido, una especie de permanencia. Existen plazos cortos de menos de seis meses hasta plazos largos de hasta 10 años o más.
  • Cuentas de ahorro: no tienen plazo ni permanencia. Podemos contratar el producto, probarlo y si nos convence, cerrar la cuenta, como cualquier cuenta corriente.
4 La liquidez

  • Depósitos: son más rígidos. Si el producto permite cancelación, pueden penalizarnos por ello. Es posible que no recibamos los intereses si cancelamos o bien, que nos hagan devolver los que hemos generado hasta la fecha.
  • Cuentas de ahorro: recuperar nuestros ahorros es tan fácil como realizar una transferencia a nuestra cuenta corriente.
5 Las aportaciones

  • Depósitos: únicamente podemos realizar una aportación al principio, en la contratación del producto.
  • Cuentas de ahorro: podemos ir aportando dinero cada vez que creamos oportuno, por lo que es posible aumentar el importe que se va remunerar.
6 El importe mínimo

  • Depósitos: el importe mínimo en los depósitos suele ir desde los 1.000 euros hasta los 20.000 euros. En el caso de que nuestros ahorros sean inferiores a estas cantidades, no podremos acceder a un depósito.
  • Cuentas de ahorro: no suelen tener importe mínimo y acostumbran a remunerar desde el primer euro.
7 La variabilidad

  • Depósitos: la TAE que firmamos al contratar un depósito no variará mientras dure el plazo.
  • Cuentas de ahorro: la TAE puede variar, por lo que puede verse reducida o aumentada en función de las necesidades de la entidad. En cualquier caso, las entidades están obligadas a avisarnos con dos meses de antelación si decide cambiar las condiciones de sus productos.