Este miércoles, un ciberataque dejó al descubierto los datos personales y bancarios de un «grupo reducido» de clientes de Vodafone. Así lo informó la compañía en su comunicado oficial, donde detalla que los ciberdelincuentes lograron acceder a información tanto de empresas como de particulares. Los datos comprometidos incluyen números de CIF y DNI, direcciones, correos electrónicos y cuentas bancarias, lo que representa un riesgo importante para los clientes de esta empresa de telefonía.

Sin embargo, Vodafone no está sola en esto. Apenas el mes pasado, en octubre, Air Europa sufrió un ataque cibernético que afectó a más de 100.000 clientes. En este caso, la situación fue aún más grave, ya que los datos expuestos incluían números de tarjeta, fecha de caducidad y, en algunos casos, hasta el CVV o código de seguridad.

¿Qué pueden hacer los delincuentes con esta información? Desde domiciliar recibos en tu cuenta bancaria hasta realizar compras online a tu cargo. En los casos más extremos, podrían incluso dejar tu cuenta bancaria en cero. Por eso, quienes no se hayan visto afectados por estos hackeos, deberían tomarlo como una advertencia y empezar a usar métodos de pago seguros.

Ten varias cuentas bancarias para más seguridad

Tener más de una cuenta bancaria es el primer paso inteligente para reducir el riesgo, especialmente si tienes ahorros. En situaciones así, lo mejor es separar el dinero de uso diario del de tus ahorros y emplear la primera cuenta para domiciliar los recibos. De esta manera, si algún hacker se las arregla para hacer de las suyas con tu número de cuenta, su acceso a tu dinero será limitado y tus ahorros permanecerán a salvo.

En este punto, es recomendable optar por cuentas de ahorro remuneradas sin comisiones ni requisitos. Y si la seguridad de tu dinero es una prioridad, mejor abstente de compartir los datos de esa cuenta o de usar esa tarjeta de débito para hacer compras online, a menos que utilices un método de pago seguro. 

Además, conviene revisar el extracto bancario con frecuencia para asegurarte de que no haya cargos no autorizados. En caso de detectarlos, recházalos desde la aplicación o comunícate cuanto antes con el servicio de atención al cliente de tu banco. 

Usa métodos de pago seguro para compras en línea

A la hora de hacer compras por Internet, existen métodos de pago seguro que eliminan las posibilidades de que un ciberdelincuente acceda a tu cuenta. Las tarjetas virtuales de un solo uso, por ejemplo, se renuevan con un número de tarjeta nuevo y único después de cada compra. De esta manera, si un hacker intercepta tus datos, ya no le valdrán de nada, porque tu banco habrá generado otros nuevos. Revolut ofrece este tipo de tarjetas incluso para quienes abren su Cuenta Standard, que cobra cero comisiones y no exige requisitos.

Otra alternativa son las tarjetas con CVV dinámico, como la tarjeta de débito Aqua del BBVA, que está asociada a su Cuenta Online sin comisiones. Se trata de un plástico que no trae el código de seguridad impreso. En cambio, el CVV cambia después de cada compra y se puede verificar desde la aplicación del banco. 

Al igual que las tarjetas virtuales, la tarjeta de débito Aqua te libera de los riesgos de hackeos: los malhechores no podrán utilizar los datos de tu tarjeta en ningún caso, porque el CVV deja de ser válido tan pronto como terminas de hacer tus compras.

No queremos ser alarmistas, pero debemos estar atentos. Los malhechores están a la orden del día y los hackeos son cada vez más frecuentes. Cuando se trata de nuestro dinero, ¡siempre es mejor prevenir que lamentar! Así que mejor que empieces a usar métodos de pago seguros cuanto antes.