Hablemos de comisiones polémicas: la comisión de administración

Hablar de comisiones bancarias conlleva adentrarse en un vergel repleto de espinas del que nunca se puede salir sin un corte por muy minúsculo que sea. Si existe una opinión que podríamos tildar de unánime dentro de los particulares del sector bancario, es que a nadie le gusta pagar comisiones. Hoy en día es posible esquivar muchas de estas comisiones mediante cuentas online, aunque todavía quedan clientes que siguen pagando comisiones y, dentro de ellas, si hay una que resulta escandalosa es la comisión de administración.

Ranking mejores cuentas sin comisiones

¿Qué es la comisión de administración?

Esta comisión, si bien hoy en día se encuentra casi extinta, aún podemos hallar bancos que la cobren. Dicha comisión consiste en un cobro de importes mayoritariamente inferiores a un euro. Semejante afirmación puede no resultar demasiado impactante, en especial si se tienen en cuenta cifras como las de la comisión de mantenimiento, que en algunos casos puede llegar a superar los 40 euros al semestre. Sin embargo, el problema de la comisión de administración radica en que se cobra por cada apunte realizado en la cuenta y no en un solo cobro. Esta comisión, por ejemplo, se aplicaría en los siguientes casos:

• En transferencias bancarias
• Durante los pagos de recibos
• En las retiradas de dinero en efectivo
• En las operaciones realizadas con cheques
• Tras las compras efectuadas con tarjeta

Es decir, que cualquier acción que quede anotada en la cuenta conllevará un coste que, de media, tiene un precio de 0,51€ por cada apunte.

¿Cuánto podría llegar a pagar?

No es descabellado afirmar que podemos pagar varias decenas de euros si realizamos muchos movimientos en la cuenta. Veamos un ejemplo realizado en base al coste medio (0,51€) durante un mes:

En un mundo donde se realizan cada vez más pagos con tarjeta (compra semanal, ocio, restaurante, etc.) y se realizan cada vez más envíos de dinero, el coste de anotar estas acciones podría suponer un incremento en la comisión de administración que, en el peor de los casos, se podría disparar si nuestro banco nos cobra también comisiones por efectuar una transferencia. El coste anual en pequeñas cantidades podría acabar siendo muy grande.

¿Cómo puedo evitar esta comisión?

De forma general, podemos optar por cuatro vías:

• Domiciliar una nómina, pensión o prestación en la cuenta. De forma habitual, una fuente de ingresos regular suele bastar para que el banco no nos aplique esta comisión.
• Cumplir con los requisitos de vinculación del banco. Si nuestra entidad nos exige una serie de requisitos además de la nómina para no pagar comisiones, deberemos cumplirlos.
• Negociar con la entidad el cobro de dicha comisión. Si tenemos un trato personal con nuestro gestor, podemos negociar el cobro de este tipo de comisión.
• Abrir una cuenta online exenta de comisiones.

¿Por qué las cuentas online están exentas de esta y otras comisiones?

La respuesta es sencilla. Las cuentas online suelen ser autogestionadas por el usuario, es decir, no se requiere la ayuda ni intervención del banco para realizar la operativa básica (transferencias, pago de recibos, ingreso de dinero, etc.) y tampoco requieren los servicios de las instalaciones de una sucursal, por lo que todo se traduce en un abaratamiento de costes para la entidad, la cual nos traslada ese abaratamiento a nuestra cuenta en forma de 0 comisiones, tal y como ocurre con las siguientes cuentas: