Clara Alba

FUENTE: Funds&Markets.com

 

Rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras. Un mantra del mundo de la inversión que, sin embargo, se olvida a menudo a la hora de seleccionar entre los distintos productos financieros. En el mercado de fondos, guiarse solo por el track record del gestor puede ser el mayor error para su cartera.

 

 

En un reciente estudio elaborado por la Universidad del País Vasco e Indexa Capital, los expertos dejaban claro el pobre comportamiento que han tenido los fondos de inversión domiciliados en España en la última década. En particular, quedaba demostrado cómo un 88,3% de los fondos analizados han obtenido una rentabilidad inferior a la de su índice de referencia en el periodo.

Ante este escenario, los ahorradores podrían preguntarse si, con estas cifras sobre la mesa, lo más apropiado sería apostar por ese otro 11,7% de productos que sí lograron comportarse mejor que el índice. Pero la conclusión es clara: tampoco merece la pena. “La estrategia de elegir los gestores ganadores en el pasado con el objetivo de obtener una mayor rentabilidad en el futuro parece menos adecuada”, indican los expertos.

El análisis se ha realizado seleccionando los 911 fondos de inversión que se han mantenido activos durante el periodo analizado (2006-2015), de entre los 4.675 fondos españoles que se han comercializado en dichas fechas. Y otra de las conclusiones más preocupantes es que la probabilidad de elegir un fondo que bata a los índices durante los cinco primeros años, para después volver a batirlos en los cinco siguientes es ínfima. Solo 16 de los fondos que forman parte del estudio lo consiguen. Menos de un 2%.

La situación se repite, además, a lo largo y ancho del mundo. Un reciente estudio de Morningstar también evidencia cómo, si bien a un año vista los fondos más rentables siguen mostrando un comportamiento superior a la media en cuanto a rentabilidad, pasados tres, cuatro y sobre todo cinco años, apenas entre un 10% y un 20% de esos mismos productos consiguen mantener su posición dentro del primer cuartil de sus respectivas categorías.

Hay otras circunstancias en las que comprar los fondos más rentables no es quizá la mejor estrategia. Desde la firma recuerdan cómo en los últimos años los fondos que mejor se han comportado han sido claramente aquellos que tienen un fuerte sesgo hacia el estilo growth o crecimiento. “Pero nada garantiza que esto seguirá así y es muy posible que los fondos value recuperen en el futuro gran parte de esa diferencia de rentabilidad”, explican en su análisis.

Los diferentes estudios evidencian, de nuevo, que un ahorrador no debe fiarse solo de los rendimientos pasados a la hora de escoger entre un producto y otro. Eso no quiere decir que el track record no deba tenerse en cuenta. Pero sí que no debe ser el único criterio de selección en un momento en el que ser selectivos, también con los gestores, se ha convertido en condición sine qua non para batir al mercado.