Muchas veces damos por hecho que lo nuevo es siempre mejor, pero ¿es eso cierto? Si nos centramos en el mundo del motor, parece que no. Actualmente, financiar un coche de segunda mano es una operación al alza, mientras que las ventas de vehículos nuevos acumulan más de un año de caídas. En lo que va de 2019, según la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), se han vendido casi un 10% menos de coches. En cambio, en ese mismo período las ventas de los de ocasión han crecido un 1,3%.

Financiar un coche de segunda mano como si fuera nuevo

Tal y como reflejan datos de la misma asociación, los precios de los coches de segunda mano en España de menos de cinco años se venden por un precio medio de unos 12.000 euros. Eso supone un ahorro importante, pero muchas veces insuficiente como para abonarlo de golpe. Por eso es habitual recurrir a la financiación para comprar un vehículo de ocasión. Para pagarlo a plazos (si la operación es a través de un concesionario) tenemos dos opciones que, en realidad, son iguales que las de un vehículo nuevo:

  • La financiación lineal: como cualquier otro crédito, el capital prestado se devolverá en cuotas con unos intereses determinados. Esta vía se puede realizar con el banco o con el concesionario y sus intereses pueden ser muy variados, desde el 5% TIN hasta el 10% o el 12%.
  • Financiación flexible: conocida también como leasing, esta solo la ofrece el concesionario y consiste en que al principio pagamos cuotas bajas dejando una muy alta para el final, momento en el que decidir si quedarnos el coche (pagando esa cuota), devolverlo o cambiarlo por uno nuevo con un contrato renovado.

Si el automóvil lo compramos a un particular también podemos solicitar un préstamo coche a cualquier entidad financiera. Sin ir más lejos, Cetelem ofrece desde 4.000 hasta 60.000 euros con su Préstamo Coche para financiar vehículos tanto nuevos como usados con un interés que parte del 6,95% TIN (7,18% TAE).

¿Por qué sube la venta de coches de segunda mano?

En un momento de incertidumbre económica por una posible recesión global, las decisiones que afectan a nuestro bolsillo se toman con mayor cautela. Eso, unido a la creciente preocupación por la contaminación y las posibles restricciones de tráfico en las grandes ciudades está provocando que la venta de coches nuevos caiga sin parar. Sin embargo, el mercado de segunda mano está muy vivo. Estos son algunos de los motivos que pueden mantener al alza este segmento de negocio:

  • Según un estudio de Coches.net, el ahorro por comprar un vehículo de hasta 5 años de antigüedad puede suponer un ahorro de hasta el 40%.
  • El precio medio de venta de estos coches se mueve en torno a los 12.000 euros, según Ganvam. Los nuevos (la media de los 15 más vendidos) llegan hasta los 15.000 euros.
  • El 70% de los coches de segunda mano vendidos proviene del renting, una opción que sigue creciendo (datos de Ganvam).

Todas estas circunstancias, unidas a las facilidades que ofrecen concesionarios y bancos para financiar coches de segunda mano, favorecen que los vehículos de ocasión de pocos años de antigüedad sean hoy una de las mejores alternativas en cuanto a relación calidad precio.