Seguro que esto te ha pasado alguna vez si has comprado un artículo costoso en grandes establecimientos como El Corte Inglés, IKEA o MediaMarkt: al pasar por caja, el personal de la tienda te ha dado la opción de pagar tu compra en varios meses si contratas su tarjeta de crédito o contratas un préstamo con ellos. ¡Y con un interés del 0%!

Aceptar su oferta es muy tentador, ¿verdad? Sin embargo, debes ir con cuidado con estas promociones, porque es posible que el préstamo sin intereses que te ofrecen incluya gastos escondidos en la letra pequeña del contrato: comisiones, seguros, etc. ¿Quieres saber cómo identificar estos cargos ocultos? Es tan fácil como mirar la TAE del crédito.

¿Qué es la TAE de un préstamo?

La tasa anual equivalente o TAE es una medida que te indica el coste anual de un préstamo. Incluye todos los gastos que tendrás que pagar por el crédito que contrates: intereses, comisiones, primas de seguros, comisiones asociadas a la cuenta que usarás para abonar las cuotas…

Por ley, siempre que una entidad te ofrezca un crédito, con o sin intereses, tiene que mostrarte cuál será su tasa anual equivalente. La verás siempre en la oferta de financiación, justo al lado del tipo de interés nominal (TIN), en la información precontractual del préstamo y en el propio contrato.

Un préstamo sin intereses será gratis si su TAE es del 0%

¿Y cómo te ayuda esta medida a saber si un préstamo sin intereses tiene gastos ocultos? En pocas palabras, si un crédito tiene una TAE del 0%, no te costará nada contratarlo: no deberás pagar absolutamente nada en intereses, comisiones ni otros costes. Es decir, que solo tendrás que devolver a la financiera el dinero que te preste.

En cambio, si te ofrecen un crédito al 0% de intereses (0% TIN), pero con una TAE de más del 0%, la financiación no te saldrá gratis. En este caso, te recomendamos leer detenidamente la letra pequeña de la oferta, porque seguro que ahí se esconde alguna comisión o algún producto asociado que te costará dinero.

¿Vale la pena contratar un crédito sin intereses, pero con comisiones?

Que un préstamo al 0% TIN incluya gastos en su letra pequeña no significa necesariamente que sea caro. Si el coste de sus extras no es elevado, es posible que sí te salga a cuenta contratarlo, pero deberás hacer cuentas para averiguarlo.

Por ejemplo, imagina que quieres comprar un mueble de 500 euros y en un establecimiento te ofrecen financiación al 0% TIN, con una comisión de apertura del 3%, y en otro te conceden un préstamo al 5% TIN y sin comisiones. Esto es lo que pagarás en cada caso si devuelves el dinero en 10 meses:

Oferta 1 Oferta 2
Importe 500€ 500€
Plazo 10 meses 10 meses
Interés 0% TIN 5% TIN
Comisión de apertura 3% 0%
Cuotas 50€/mes 51,15€/mes
Coste total 15€ 11,53€
Total a devolver 515€ 511,53€

En este caso concreto, te saldrá más a cuenta comprar el mueble con el préstamo con intereses que con la financiación al 0% TIN.

Cuidado: los préstamos al 0% suelen tener plazos muy cortos

Otro aspecto que debes tener presente es que, en general, los créditos sin intereses suelen tener un plazo muy corto, que rara vez supera los 10 o los 12 meses. Si la compra es de mucho dinero y necesitas devolverla en varios años, los grandes establecimientos también te ofrecerán financiación a más largo plazo, pero normalmente con un interés de más del 10% TIN.

Si este es tu caso, te recomendamos explorar otras opciones de financiación: los créditos de los bancos, de los establecimientos financieros de crédito… Si buscas un poco, no te costará encontrar ofertas con un tipo de interés de menos del 7% o del 8% y sin comisiones de apertura o de estudio.

Un buen ejemplo es el Préstamo Personal de Cofidis, que puedes contratar si has abierto un crédito anteriormente con esta entidad. Este crédito te permite obtener entre 4.000 y 60.000 euros, a devolver hasta en diez años con un interés desde el 5,25% TIN (5,38% TAE) y sin comisiones ni productos asociados.