¿Conoces la paradoja de la elección? El psicólogo norteamericano Barry Schwartz le dedica un libro entero que se titula, precisamente, La paradoja de la elección: Por qué más es menos (2004). Según este profesional de la mente, tener demasiadas opciones entre las que escoger puede ser contraproducente, porque te aturulla y te genera ansiedad.

Pero ¿qué tiene que ver esto con las finanzas? Pues más de lo que crees. Pongamos que necesitas pedir dinero prestado por el motivo que sea. Si exploras las opciones disponibles, verás que tienes un montón entre las que elegir: puedes pedir un préstamo normal y corriente, contratar una línea de crédito, recurrir a los créditos rápidos o a los minipréstamos que ofrecen los prestamistas privados…

Nuestra misión, desde HelpMyCash, es ahorrarte agobios y ayudarte a tomar la mejor decisión financiera posible. Por ello, en este artículo te guiaremos en este laberinto de opciones crediticias y te explicaremos qué tipo de préstamo debes elegir en función del gasto que quieras financiar y del estado de tu salud económica.

Necesito financiar un gran proyecto personal

Pongamos que necesitas el dinero para financiar un proyecto particular de cierta envergadura: comprar un coche, pagar un máster, reformar tu casa… En este caso, contratar un préstamo personal de los de toda la vida es la opción más aconsejable. Con estos productos podrás conseguir grandes importes, de hasta 50.000 euros o más, a devolver en un plazo que puede alcanzar los ocho o los diez años. Además, con un interés competitivo, que suele ser de alrededor del 6% TIN.

Estos préstamos los puedes pedir a un banco o a un establecimiento financiero de crédito (EFC), que son entidades supervisadas por el Banco de España que tienen permiso para conceder financiación. Podemos distinguir entre dos tipos de préstamos personales:

  • Los que sirven para financiar cualquier proyecto. Por ejemplo, el Préstamo Personal de Bank Norwegian lo puedes pedir para comprar un coche, para reformar tu casa o para cualquier otro gran gasto que tengas en mente. Su importe es de hasta 50.000 euros, su plazo es de hasta diez años y su interés es desde el 5,99% TIN (6,13% TAE).
  • Los que sirven para financiar proyectos concretos. Por ejemplo, el Préstamo WZ Reforma de ECO solo sirve para mejorar la sostenibilidad de tu hogar. Tiene un importe de hasta 30.000 euros, un plazo máximo de ocho años y un interés desde el 4,50% TIN (4,59% TAE).

Nuestro consejo es que pidas financiación a entidades que ofrezcan ambos tipos de préstamos. De este modo, podrás comparar sus condiciones y podrás decantarte por el producto que sea más barato y se ajuste mejor a tus necesidades.

Necesito un préstamo para cubrir un gasto puntual o una emergencia

Es posible, también, que necesites el dinero para cubrir un gasto puntual. Por ejemplo, para pagar una compra muy elevada (un televisor de alta gama), para arreglar el aire acondicionado que se te ha averiado o para liquidar una multa que te han puesto por superar el límite de velocidad de la autopista. En este caso, el tipo de préstamo que te conviene será uno u otro dependiendo de tu situación económica.

Si tu perfil es bueno

Imagina que tu economía está saneada, es decir, que tienes un trabajo estable, un buen sueldo y pocas o ninguna deuda. Esto te dará acceso a los siguientes créditos:

  • Un préstamo preconcedido. Hay bancos que te preaprobarán un crédito si ven que tu perfil es bueno. Para contratarlo, lo único que tendrás que hacer será aceptar su oferta e indicar cuánto dinero necesitas, dentro del rango que tengas disponible. El dinero se te ingresará automáticamente y lo podrás usar para cubrir cualquier gasto. Una de las entidades que ofrecen préstamos preconcedidos es CaixaBank, que puede prestarte entre 500 y 30.000 euros con un plazo de hasta cuatro años y un interés desde el 19,84% TIN (21,73% TAE).
  • Un anticipo de nómina. También hay entidades que pueden adelantarte el equivalente a una o más nóminas si tienes tus ingresos domiciliados en una de sus cuentas. Son una buena opción para conseguir dinero rápidamente, porque suelen aprobarse e ingresarse los anticipos en unas 24 horas. Banco Santander, por ejemplo, puede adelantarte el importe de dos nóminas (con un máximo de 9.000 euros), con un plazo devolución de hasta un año y un interés del 0% TIN (7,87% TAE por el cobro de una comisión de apertura de entre el 1,5% y el 4%).
  • Una línea o tarjeta de crédito. Otra opción es que te cures en salud y contrates una línea o tarjeta de crédito con antelación. Es un producto que te da acceso a un importe determinado y te permite ir retirando las cantidades de dinero que necesites en cada momento, siempre sin superar el máximo disponible. Así, si tienes algún gasto puntual que financiar, podrás hacer una disposición inmediatamente para cubrirlo. El Crédito Directo de Cofidis, por ejemplo, es una línea de crédito de hasta 6.000 euros que te permite devolver las disposiciones en hasta 41 meses, con un interés desde el 18,31% TIN (19,93% TAE).

Todas estas opciones suelen ser más caras que contratar un préstamo convencional, porque la entidad corre más riesgo al prestarte el dinero (no tiene tiempo de analizar detenidamente tu perfil). Nuestro consejo es que hables con tu banco para saber si tienes un anticipo o un preconcedido disponibles, que pidas líneas de crédito a varios bancos y EFC y que te decantes por el producto que tenga un menor interés.

Si tu situación económica es delicada

Pero ¿qué pasa si tu situación económica no pasa por su mejor momento? Por ejemplo, si tu trabajo es temporal, si tu nómina no es muy alta o si tienes varias deudas vigentes. En este caso, es muy poco probable que un banco o un establecimiento financiero de crédito te presten dinero para cubrir un gasto puntual. Por lo tanto, deberás recurrir a los prestamistas privados que no están inscritos en el Banco de España.

Dependiendo del dinero que necesites, podrás acceder a los siguientes productos:

  • Un minicrédito. Es un pequeño préstamo de entre 50 y 1.000 euros que se suele devolver en un mes como máximo, mediante el pago de una única cuota. Normalmente, su interés es del 1% diario, aunque hay prestamistas que te ofrecerán el primer minicrédito gratis. MoneyMan, por ejemplo, puede prestarte hasta 300 euros al 0% TIN (0% TAE) si eres un cliente nuevo.
  • Un crédito rápido. Es un préstamo de entre 500 y 5.000 euros que puedes devolver en varios años y en cuotas mensuales. Su interés suele ser de más del 50% anual. El Préstamo Fidinda, por ejemplo, te permite obtener entre 500 y 5.000 euros, a devolver hasta en tres años y con un interés del 60% TIN (79,60% TAE).

La ventaja de estos productos es que se aprueban e ingresan en menos de 48 horas y que puedes conseguirlos aunque tu situación económica sea delicada. Sin embargo, son mucho más caros que los préstamos convencionales y el resto de alternativas que te hemos propuesto. Por este motivo, solo te los recomendamos si no tienes más remedio y cuentas con los ingresos suficientes para pagar sus cuotas sin problemas.