Como consecuencia del aumento de la solicitud de créditos personales, el Banco de España teme por una nueva subida de la morosidad. Y es que, aunque dicho índice descendiese a finales del pasado año, todavía son muchas las personas que a efecto de los impagos (que ascienden a altos importes), les cuesta llegar a fin de mes. En estos casos, los préstamos con garantía hipotecaria pueden ayudarnos a reunificar nuestras deudas e intentar que nuestra economía se encauce de nuevo.
¿Dónde acudir si quiero reunificar mis deudas?
En primer lugar, debemos tener claro que cuando hablamos de reunificar deudas nos referimos a la posibilidad de contratar un crédito que acumule todos nuestros impagos, con el objetivo de poder abonar una única cuota a final de mes. Por ello, si queremos mejorar nuestra situación, es aconsejable intentar negociar con la entidad con la que tengamos la deuda más alta, pues esta estará interesada en que le devolvamos el dinero pendiente.
En segundo lugar, si nuestro banco nos rechaza, los préstamos con garantía hipotecaria pueden convertirse en una buena opción, ya que nos ofrecerán hasta 300.000 euros a devolver hasta en 20 años. Eso sí, es importante tener en cuenta que para poder acceder a este tipo de créditos deberemos tener una casa en propiedad, que figurará como garantía de nuestros pagos. Un buen ejemplo de empresa es Supregrupo, con la que podremos conseguir hasta el 40% del valor de nuestro inmueble (desde un 8,95% TIN 9,33% TAE) y a devolver en un plazo máximo de 20 años.
Ojo, no perdamos de vista el interés
Una de las principales ventajas que nos ofrece la reunificación de deudas es el hecho de poder reducir nuestra cuota del préstamo a cambio de alargar el plazo de devolución. Sin embargo, debemos ser conscientes de que contra más tardemos en devolver un préstamo más intereses se generarán.
Pongamos un ejemplo. Si solicitamos 40.000 euros para saldar nuestros impagos a un tipo de interés del 8,95% TIN y a devolver en 15 años, al final de este periodo habremos pagado en intereses 32.813,6 euros. Sin embargo, si redujésemos el plazo de devolución a 10 años, los intereses también disminuirían y acabaríamos pagando 20.674,4 euros.
Eso sí, no podemos olvidar que únicamente deberemos solicitar un préstamo con garantía hipotecaria si somos conscientes de que lo podremos devolver, pues el impago podría propiciar incluso la pérdida de nuestro hogar.
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