Vender un piso puede tomar algo de tiempo. Especialmente, en estos momentos de incertidumbre en los que nos encontramos a causa del coronavirus. Los expertos del sector inmobiliario prevén que la pandemia provocará un enfriamiento de la demanda y, por tanto, costará más encontrar al tan ansiado comprador. Pero ¿qué pasa si nos urge vender la casa? Afortunadamente existen empresas que nos compran el inmueble en muy pocos días y sin grandes complicaciones. En este artículo explicamos qué son estas compañías, conocidas como iBuyers y cómo funcionan para vender nuestro piso en apenas 7 días.

IBuyers: la nueva forma de vender nuestra casa

Los iBuyers son empresas proptech que compran nuestra vivienda directamente y sin intermediarios. Estas se apoyan en la tecnología para hacer que el proceso de compraventa se realice de forma digital y, gracias a esto, acortan de forma significativa los tiempos de venta.

 

Han surgido con fuerza en los últimos años en España y se convierten en una alternativa para todos aquellos vendedores que tienen prisa por vender sus viviendas o que, simplemente, se quieren evitar todo el papeleo y lo que implica vender una casa. Pero ¿cómo funcionan los iBuyers?

Los iBuyers permiten vender nuestro piso a tan solo pocos clic

El funcionamiento de los iBuyers es muy sencillo, ya que una gran parte del proceso se realiza totalmente online. Para poder vender nuestro piso a una de empresas solo tenemos que seguir los siguientes pasos:

1. Pedir una oferta al iBuyer de nuestro interés

El primer paso es contactar con la empresa de nuestro interés y rellenar el formulario de solicitud de la oferta. En este tendremos que indicar todos los datos del piso: ubicación, características de la casa y de la finca, etc.

Una vez que la empresa recibe la información, nos enviará una oferta por nuestro piso en tan solo 24 o 48 horas. Esta puede tener una validez de entre tres y quince días, según el iBuyer.

2. Confirmar el precio con el iBuyer

Si la oferta cumple con nuestras expectativas y nos interesa, es posible que un experto de la empresa venga a nuestra casa. Este tendrá que evaluar las condiciones de la casa, revisar la documentación que tenemos de la propiedad y confirmar el precio de la vivienda con nosotros.

3. Aceptar la oferta final para ejecutar la venta

Si aceptamos la oferta final que nos hace el iBuyer al visitar nuestra casa, la empresa se encargará de gestionar toda la documentación de la venta. Por ejemplo, sacará el certificado energético y la cédula de habitabilidad si no los tenemos y sin coste alguno para nosotros.

Una vez lista la documentación, solo tendremos que acudir a la notaría para ejecutar la venta de nuestro piso y recibir el dinero al contado en el momento de la firma. Lo mejor de todo: esto puede suceder en muy pocos días y sin tener que pagar ningún tipo de comisión por ello.

Toda venta flash tiene sus condiciones

Debido a lo fácil que resulta vender a un iBuyer, es inevitable que nos preguntemos ¿es todo tan maravilloso como parece? Aunque con una de estas empresas podemos conseguir vender nuestro piso de forma muy rápida, hay que tener en cuenta que esta venta flash implica hacerlo por un precio inferior al valor de mercado de la vivienda.

De manera general, las ofertas de estas empresas pueden estar entre un 8% y un 10% por debajo del precio que quizás obtendríamos con una venta convencional. Además, hay que considerar que, generalmente, el piso debe cumplir con ciertos requerimientos como, por ejemplo, no tener inquilinos, no tener problemas legales o estar ubicado en grandes ciudades como Barcelona, Madrid, Sevilla o Valencia.

Incluso, en algunos casos, la vivienda debe tener algunas características como tener ascensor, no exceder de cierto precio o tener una cantidad mínima de metros cuadrados. Así, vender un iBuyer no es una opción disponible para todo el mundo.