Los préstamos preconcedidos son un producto de financiación que ofrecen la mayoría de los bancos a sus clientes sin que estos lo hayan pedido previamente. Funcionan como otros créditos al consumo, solo que el banco, tras valorar si tenemos un buen perfil, nos ofrece un crédito a medida, rápido y sin papeleos. No obstante, como cualquier otra financiación, tiene condiciones. Veamos cuándo puede salir a cuenta contratarlo y cuándo no.

Cuando las condiciones del préstamo preconcedido son buenas

Para saber si las condiciones de un préstamo preconcedido son buenas y nos convienen, debemos mirar los siguientes factores:

  • Importe: como el crédito ya ha sido preaprobado, el banco ya ha decidido el importe. Por ello, debemos comprobar si la cantidad de dinero que el banco nos ofrece es suficiente para cubrir nuestro gasto.
  • Plazo: es importante mirar en cuánto tiempo podemos devolver el dinero. Cuanto más tardemos, más intereses se generarán. Así que podríamos acortar el plazo de devolución al mínimo que nos podamos permitir pagar.
  • Interés: se recomienda que el interés sea inferior a la media del mercado, que actualmente se sitúa en 8,20% TAE, de acuerdo con los últimos datos del Banco de España.
  • Comisiones: es posible que el banco nos cobre alguna comisión (apertura, estudio, amortización anticipada). Todos estos cargos tienen un coste, así que lo mejor es que no los incluya.
  • Productos adicionales: algunos bancos aprovechan los créditos preaprobados para vender algún otro producto, como, por ejemplo, un seguro. Por ello, debemos fijarnos que no los incluyan porque suelen tener un coste elevado.

Podemos conocer el detalle de estas condiciones en la oferta precontractual del préstamo. Si el crédito que nos ofrecen no cumple con la mayoría de las recomendaciones anteriores, estamos delante de un préstamo preconcedido que no es útil contratarlo.

Cuando necesitamos el dinero para cubrir un gasto en concreto

Si necesitamos conseguir dinero para pagar un gasto imprevisto, conviene contratar un préstamo preconcedido ya que la concesión es automática y sin papeleos. Para formalizar esta operación, solo tenemos que aceptar la oferta a través de cualquiera de las vías disponibles que pueden ser en el cajero automático del banco, en la oficina del banco, llamando por teléfono, en la app o en nuestra banca online.

En general, el importe al que podemos acceder con un crédito preautorizado no es muy elevado porque los bancos tratarán de minimizar el riesgo prestando menos dinero. No obstante, si necesitamos más dinero rápido para pagar un gasto imprevisto, podemos buscar otras alternativas de financiación y calcular si nos sale más a cuenta pedir un préstamo personal con otra entidad.

Por ejemplo, las financieras online como Cofidis, ofrecen préstamos personales rápidos y sin cambiar de banco. Con el Crédito Directo de esta entidad, podemos obtener hasta 4.000 euros a un tipo de interés fijo, de 19,93% TAE, con la posibilidad de obtener una rebaja de 1% cuando se pide con cotitular. De cualquier manera, aun teniendo un préstamo preconcedido, lo recomendable es buscar al menos tres ofertas de préstamos y comparar para elegir la que más nos convenga.

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