Dicen que más vale malo conocido que bueno por conocer, pero no siempre es verdad. Cambiar la hipoteca de banco o, lo que es lo mismo, hacer una subrogación de hipoteca podría ser una oportunidad para mejorar algunas condiciones de nuestro préstamo y ahorrar en intereses. Eso sí, esta operación no es gratuita, pues tendremos que pagar la comisión por subrogación si la hubiera más los gastos de inscribir el traslado de hipoteca, de la tasación, de la gestoría y los honorarios notariales. A continuación detallaremos qué condiciones podemos mejorar con el cambio y cuáles serían los costes asociados.
¿Qué podemos cambiar con la subrogación de hipoteca?
Como observamos en la infografía, el hecho de cambiar nuestra hipoteca de banco podría mejorar algunas de las condiciones más relevantes del contrato.
Unas de las modificaciones más recurrente es pasar del tipo variable al fijo, una opción que nos permitiría establecer una cuota estable en el tiempo beneficiándonos del tipo de interés tan competitivo que ofrecen las hipotecas fijas en estos momentos y que ronda el 1,75%.
Por otra parte, mediante la subrogación de hipoteca también sería posible negociar un tipo de interés más bajo o ampliar el plazo de amortización para pagar menos cada mes. Además, podríamos aprovechar para eliminar cláusulas abusivas y comisiones y reducir o deshacernos de los productos combinados que nos ligan a la entidad.
Por el contrario, con la subrogación de hipoteca no podremos ampliar el capital de nuestro préstamo ni añadir o quitar avalistas o titulares.
¿Cuánto cuesta cambiar la hipoteca de banco?
Antes de mover nuestra hipoteca a otra entidad, sería recomendable hacer un cálculo aproximado del gasto que supondría. En primer lugar, tendríamos que contabilizar los costes fijos asociados a la operación: los honorarios notariales, la factura de la gestoría, la inscripción del traslado de la hipoteca en el Registro de la Propiedad y la tasación del inmueble.
En segundo lugar, tendríamos que revisar el contrato vigente de nuestra hipoteca para saber con certeza qué comisiones afectan a la operación. Por lo general, la mayoría de las hipotecas suele tener una comisión por subrogación que varía en función del año en el que firmamos y de los años que hayan pasado desde entonces.
Del mismo modo, si contratamos en su momento una hipoteca fija o mixta, tendríamos que consultar si el banco se reserva el derecho de cobrarnos una comisión por la pérdida financiera que le pueda ocasionar la subrogación. Además, podría ser que la entidad a la que nos gustaría mover nuestra hipoteca nos cobrase una comisión de apertura, aunque el Banco de España lo considera una mala práctica.
*La comisión de subrogación variará dependiendo del momento en el que firmamos la hipoteca, de cuántos años lleve vigente el contrato y de si pagamos un interés fijo o variable.
Ejemplo práctico
Si quisiéramos cambiar de banco una hipoteca con un capital pendiente de 128.000 euros, la operación nos podría costar unos 1.600 euros incluyendo todos los gastos asociados a la operación y suponiendo que la comisión por subrogación fuera del 0,25%.
Si estás pensando en cambiar tu hipoteca de banco y no sabes por dónde empezar, consulta la guía gratuita de HelpMyCash.com o pregúntanos directamente a través del foro de hipotecas.
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