Una hipoteca es un producto complejo definido por muchos factores como pueden ser el interés, las vinculaciones y comisiones, el plazo y, por supuesto, la cantidad que nos concede el banco. Cuando pedimos un préstamo hipotecario debemos procurar que se ajuste lo máximo posible a nuestras necesidades, pero si pasado el tiempo estas son distintas podemos intentar negociar una novación para cambiar las condiciones de la hipoteca. Te contamos lo que debes tener en cuenta para tener éxito y mejorar tu contrato hipotecario.

Convence al banco para modificar el contrato

Debemos tener claro que el banco no está en ningún caso obligado a aceptar una novación, por lo que puede ponernos cualquier condición para no concedernos el cambio que deseamos y que pueden afectar a los siguientes aspectos:

  • Interés: podemos cambiar el tipo o incluso reducir el interés que firmamos en su día con la entidad.
  • Índice de referencia: si tenemos IRPH y queremos pasarnos a euríbor sin cambiar de entidad podemos hacer una novación.
  • Ampliación de plazo: nos permitirá asumir cuotas más bajas, aunque incrementará los intereses.
  • Ampliación de capital: si tenemos que asumir nuevos gastos. En este caso, deberemos pagar IAJD y una nueva tasación.
  • Quitar cláusulas abusivas: si tenemos suelo o alguna otra cláusula que nos perjudique, podemos eliminarla al hacer la novación.
  • Cambiar los titulares: para añadir o quitar titulares hay que llegar a un acuerdo con el banco.

Algunas de estas operaciones, como la de rebajar el interés o quitar un titular, pueden perjudicar significativamente al banco, que verá reducidos sus beneficios o sus garantías en caso de impago. Por eso, es probable que nos exijan aportar garantías extra (como un aval u otro titular) o aceptar nuevas condiciones como pueden ser más productos vinculados.

¿Quieres cambiar las condiciones de la hipoteca para pasarte al tipo fijo? Mejor espera

Si queremos cambiar el tipo de nuestra hipoteca para pasarnos a una fija, la recomendación es que nos esperemos a que entre en vigor la nueva ley hipotecaria, ya que facilitará el trámite. Mientras tanto, podemos comparar las mejores ofertas fijas del mercado:

Producto Interés Comisiones Vinculación Pedir más información
Hipoteca Fija
de Bankinter
Desde el 1,50 % a 10 años hasta el
2,35 % a 30 años
  • Apertura: 1 %
  • Amortización: 0,5 %
    (0,25 % a partir del sexto año)
  • Subrogación: 0,5 %
    (0,25 % a partir
    del sexto año)
  • Riesgo por tipo de interés: 0,75 %
  • Domiciliación de nómina
  • Domiciliación de recibos
  • Seguro de hogar
  • Seguro de vida
Hipoteca Fija
Kutxabank
2,50 %
  • Apertura: 0,25 %
  • Domiciliación de nómina
  • Seguro de hogar
  • Seguro de vida
  • Tarjeta de crédito
  • Plan de pensiones
Hipoteca Tipo Fijo de Hipotecas.com Desde el 2,50 % a
10 años hasta el
2,95 % a 30 años
  • Sin comisiones
  • Sin vinculación

Actualmente realizar una novación suele tener una comisión que oscila entre el 0,1 % y el 1 %, además de toda una serie de gastos asociados que encarecen el trámite. Sin embargo, la nueva ley hipotecaria que se espera que entre en vigor a principios de 2018, rebajará la comisión al 0,25 % durante los tres primeros años, desapareciendo después. Esta medida, de carácter retroactivo, también rebajará significativamente los gastos de gestoría y notaría asociados a la operación.

Si el banco no acepta la novación, puedes optar por una subrogación

En el caso de que la entidad bancaria no nos acepte una novación, siempre podremos acudir a la vía de la subrogación para modificar el contrato llevándonos nuestra hipoteca a otro banco.

Hay que tener en cuenta que mediante la subrogación no podremos cambiar el plazo ni ampliar el capital. Además, si nuestra entidad hace una contraoferta igualando o superando la del otro banco durante los 15 días siguientes a la presentación de la oferta vinculante, deberemos permanecer con ellos y modificar las condiciones mediante una novación.

Para conocer todos los detalles de la subrogación puedes consultar la guía Cómo subrogar tu hipoteca.