La venta de un piso es una operación compleja que requiere cierto tiempo y esfuerzo de nuestra parte. Esto se debe a que, no solo debemos tener disponibilidad para realizar los trámites que se necesitan para vender el piso, sino que también tenemos que hacer todo lo posible para conquistar a un comprador. Por este motivo, es habitual contratar a una agencia inmobiliaria para que se encargue de gestionar la venta por nosotros. Pero, como en todos los sectores, existen algunas empresas que ofrecen un mejor servicio que otras. Por esto, antes de quedarnos con una agencia, deberíamos evaluar bien a quién contratamos.

1. Verifica su reputación online

Es muy importante que, antes de contratar a una agencia, investiguemos un poco sobre ella, su trayectoria y la reputación que tiene en el sector. De esta forma, podemos saber si la agencia ofrece un servicio de calidad y si estamos tratando con profesionales.

Para ello, podemos mirar las opiniones que existen sobre la agencia en la web. Esto nos puede servir no solo para corroborar el grado de satisfacción que tienen otros clientes, sino que también nos puede advertir sobre posibles malas prácticas. La experiencia de otros usuarios puede ser vital para saber la calidad del servicio que presta.

Además, también podemos curiosear los anuncios de otros pisos que la agencia tiene publicados en los portales inmobiliarios. Esto nos dará una idea de la cartera de clientes que tiene, el tiempo en que logran vender una casa y la forma en que publicitan un inmueble.

2. Pide una explicación detallada de los servicios que incluyen los honorarios

Debemos saber con exactitud por lo que vamos a pagar. Por este motivo, es vital que con antelación preguntemos a la agencia cómo trabajan y que servicios nos incluye la comisión o cuota que pagaremos por la intermediación.

Por ejemplo, saber si pueden hacer las visitas por nosotros o qué documentos pueden gestionar en nuestro nombre. Además, debemos tener muy claras las condiciones del contrato y el tiempo de duración del mismo. Así, nos podemos evitar muchos inconvenientes.

3. Si te pide exclusividad, vigila que el tiempo no sea excesivo

Si la agencia con la queremos trabajar nos pide exclusividad debemos vigilar que la duración de esta sea prudencial. En este sentido, es recomendable que oscile entre los tres y los seis meses, pero que en ningún caso llegue a un año.

Debemos tener en cuenta que si firmamos un contrato de exclusividad no podemos vender el piso con ninguna otra inmobiliaria. Por esto, si el tiempo del contrato es de pocos meses, si no nos logran vender el piso en el tiempo deseado o no estamos conformes con el trabajo que están realizando, no tendremos que esperar mucho tiempo para que venza la cláusula y podamos cambiarnos de agencia.

4. Desconfía si te dan una tasación muy alta

Una de las ventajas que tiene vender con una inmobiliaria es que poseen un conocimiento muy amplio de la zona y del mercado. Por lo que su opinión puede ser de mucha ayuda a la hora de fijar el precio de venta de nuestro piso.

No obstante, es importante que antes investiguemos por nuestra cuenta la situación del mercado. Para ello, podemos realizar varias tasaciones online gratuitas en la web de nuestra vivienda y compararlas con los precios de pisos similares al nuestro a la venta en los portales inmobiliarios.

Así tendremos una idea realista en la cabeza, por lo que sabremos si una agencia nos está dando una valoración muy alta solo para captarnos como clientes. Una inmobiliaria que decore la realidad y que no nos haga un análisis realista y justificado del precio al que debemos vender no puede ser muy fiable.

5. Lee la letra pequeña de la hoja de encargo antes de firmar

Por último, es importante que todos los términos y condiciones negociados con la agencia queden reflejados en la hoja de encargo. Por esto, es vital que leamos detenidamente el documento y nos aseguremos que este no tiene una letra pequeña que podemos pasar por alto y que luego puede perjudicarnos.

Si hay algo que no entendemos o que no nos queda claro, es fundamental que pidamos a la inmobiliaria que aclare nuestras dudas antes de estampar nuestra firma y comprometernos de forma contractual con la inmobiliaria.