Antes de elegir una cuenta corriente, es importante tener presentes una serie de aspectos que nos ayudarán a escoger una cuenta que satisfaga nuestras necesidades y que tenga una buena relación calidad-precio, entendiendo el precio como las comisiones que puedan cobrarnos y la calidad como las ventajas que nos ofrezca la cuenta. Así no nos dejaremos llevar por la primera oferta que veamos, que luego puede traernos más de un disgusto en forma de gastos inesperados o de requisitos poco atractivos, como una permanencia. A continuación, 5 consejos para escoger una cuenta corriente:
1- Comprobar si tiene comisiones
Muchos bancos incluyen comisiones en sus cuentas que podríamos evitar si abriésemos una cuenta sin comisiones. Las comisiones más habituales que deberíamos conocer antes de abrir una cuenta son las siguientes:
- Comisión de mantenimiento
- Comisión de administración
- Comisión por transferencias
- Comisión por el ingreso de cheques
- Comisión por descubierto
- Comisión por reclamación de posiciones deudoras
- Cuotas de emisión y de renovación de las tarjetas
Todas ellas son evitables. De hecho, cada vez son más las entidades que comercializan cuentas sin comisiones con las que nos podemos ahorrar mucho dinero al año.
Para conocer las comisiones que cobra una entidad podemos consultar el tablón de anuncios de la página web de cada banco o preguntarlo directamente en una oficina.
2- Averiguar la solvencia del banco
La fortaleza de una entidad es importante, sobre todo teniendo en cuenta que vamos a dejarle nuestro dinero. No obstante, hay que tener en cuenta que el FGD español cubre hasta 100.000 € por titular y entidad en caso de que un banco quebrase. Aun así, nunca está de más comprobar la solvencia de la entidad en la que vamos a dejar nuestro dinero.
Si quieres saber el ratio de solvencia otorgado a los bancos por las agencias calificadoras como Fitch o Standard & Poor’s, pincha aquí.
3- Decidir qué tipo de ventajas nos interesan más
Hoy en día ya no hace falta conformarse con una cuenta sin comisiones, sobre todo si domiciliamos la nómina, ya que la mayoría de las entidades incorporan ventajas muy atractivas a sus cuentas, como, por ejemplo, la devolución de una parte de los recibos, rentabilidad, regalos, seguros gratuitos, descuentos al repostar carburante, etc. Lo mejor, antes de abrir una cuenta, es identificar las ventajas que más nos interesan y no dejarnos llevar por la primera oferta que veamos.
4- Comprobar los requisitos de la cuenta
Este punto es especialmente importante por dos razones: primero, porque si no los cumplimos, no podremos abrir la cuenta, así que cuando antes lo sepamos mejor; y, segundo, porque a veces no hace falta aceptar ciertos requisitos, como una permanencia, para abrir una cuenta cuando otras entidades nos ofrecerían el mismo producto con menos exigencias.
5- Comparar la oferta
Antes de elegir una cuenta, lo mejor que podemos hacer es comparar las distintas ofertas que hay en el mercado para saber qué tipo de productos suelen ofrecer los bancos y encontrar el que mejor se adapte a lo que buscamos.
Si quieres, puedes utilizar el comparador gratuito que HelpMyCash.com pone a tu disposición: en pocos minutos podrás tener una idea general de cuáles son las mejores cuentas del mercado y seleccionar aquélla que más te interese.
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