La cuota de la hipoteca puede ser el mayor gasto que se enfrenta una familia cada mes. Hay muchos hipotecados que creen que la cuota es un valor inalterable, pero la verdad es que existen fórmulas para reducirlas o flexibilizar su pago. La clave está en negociar. En este artículo explicamos 4 formas de reducir la cuota de la hipoteca y 3 formas para disminuir el coste de la hipoteca en general, así empezar a ahorrar cada mes.

¿Cómo puedo reducir la cuota de la hipoteca?

Tenemos varias opciones para intentar que el banco nos reduzca o aplace la cuota:

  1. Renegociar el plazo de amortización. Es una forma efectiva para reducir las mensualidades de forma permanente. A pesar de esto, hay que tener en cuenta que si aumentamos el plazo de amortización de la hipoteca, automáticamente aumentarás los intereses a pagar, y por tanto, el importe de la hipoteca. Un ejemplo: para una hipoteca de 150.000 euros a 30 años, con un interés a Euríbor + 1,25 %:
  • A 30 años pagamos una cuota de 511.73 €, y sumando los intereses, acabamos devolviendo 184.222 €.
  • A 40 años, la cuota será de 409,56 €, pero el dinero que acabamos devolviendo al banco en total es 196.591 €, es decir, 12.369 € de más que su hubiéramos firmado una hipoteca a 30 años.
    1. Solicitar un periodo de carencia. El periodo de carencia consiste en pagar solo la parte de intereses o la parte de capital durante un tiempo, que normalmente va de 3 meses a 5 años. También existe la carencia total, es decir, en la que no pagamos nada de cuota durante un tiempo determinado.
    1. Aplazar hasta un 30 % del capital al pago de la última cuota. Con esta operación pagaríamos cuotas mucho más bajas, pero para asumir la última, normalmente deberíamos abrir de nuevo una hipoteca para el capital pendiente.
    2. Aplazar cuotas. Algunos préstamos hipotecarios cuentan con una cláusula que permite aplazar un número de cuotas al año. De esta forma, si el hipotecado prevé muchos gastos durante un mes concreto, puede aplazar la cuota a otro mes. Sin embargo, esta opción solo será posible si consta en el contrato de la hipoteca.

Hay que tener en cuenta que cualquier de las 4 opciones mencionadas arriba para abaratar la cuota de la hipoteca, probablemente encarecerán el coste total del préstamo.

¿Cómo puedo reducir el coste total de la hipoteca?

Si lo que queremos es reducir el coste total de la hipoteca, es decir, lo que al fin y al cabo acabamos pagando, a continuación explicamos 3 posibles soluciones:

  1. Renegociar el tipo de interés. Mediante una novación de la hipoteca, podremos renegociar las condiciones con el banco. Para conseguirlo, se pueden usar todos los argumentos que se crean necesarios: la puntualidad de los pagos, los años y grado de vinculación con el banco… Si nos decantamos por esta opción, hay que vigilar que si el banco nos rebaja el interés a cambio de contratar un producto vinculado, podríamos acabar pagando de más.
  2. Hacer un amago de subrogación. Para mejorar nuestras condiciones, debemos conseguir que uno o más bancos nos den una oferta vinculante por escrito, y con la oferta en mano nos será mucho más fácil negociar con nuestra entidad. En este punto, nuestro banco deberá decidir si mejora las condiciones de la oferta vinculante para lograr que nos quedemos o nos deja marchar a un banco de la competencia.
  3. Subrogación de la hipoteca. Si ya le hemos presentado una oferta vinculante de otro banco al nuestro y no ha querido igualar o mejorar las condiciones, podemos cambiar la hipoteca de banco. Hay que tener en cuenta que la subrogación no es gratuita, y debemos calcular que los gastos de cambio de banco los amortizamos con verdaderas mejoras en la hipoteca. Los expertos de HelpMyCash han realizado una guía gratuita sobre Cómo subrogar la hipoteca, con consejos y todos los pasos a seguir en caso que decidamos cambiar la hipoteca de banco.

Algunos consejos a tener en cuenta

  • Si hacemos una novación de hipoteca, es decir, modificar las condiciones del préstamo, puede ser que nos cobren una comisión que suele oscilar entre el 0 % y el 1 % del importe pendiente de la hipoteca. Debemos valorar el cuál será el ahorro que conseguiremos con el nuevo tipo de interés.
  • Siempre nos será más fácil negociar la hipoteca si nuestro perfil financiero es bueno y contamos con cierta antigüedad en la entidad. De esta forma el banco considerará que corre poco riesgo con nosotros.