Los préstamos con garantía hipotecaria son una forma de financiación que sirven para proyectos de gran envergadura y que requieren poner como aval nuestra vivienda en propiedad para poder contratarlos. Si bien poner una vivienda como garantía conlleva el riesgo de perderla si dejamos de pagar, esto nos permitirá obtener grandes cantidades de financiación similares a una hipoteca para varios proyectos. Eso sí, antes de contratarlos es primordial estar completamente seguros de poder hacer frente al pago de las cuotas mensuales. ¿Para qué finalidades podemos destinar la financiación de este tipo de créditos?

Financiación para empresas y emprendedores

Especialmente en estos meses de incertidumbre económica y con muchos negocios afectados por el estado de alarma, obtener financiación bancaria para empresas (a pesar de los créditos ICO del Gobierno) para emprender un negocio o mantener el nuestro a flote es más complicado que de costumbre.

Si tenemos un local o una vivienda en propiedad, podremos utilizarla para obtener hasta el 40% del valor del inmueble y obtener el crédito que buscamos. Además, en la mayoría de ocasiones suelen conceder una carencia inicial de hasta cinco años y no requieren tener unos ingresos para poder solicitarlos.

Entidad Condiciones Me interesa
Préstamos con garantía de un inmueble Supre Grupo
  • Para cualquier persona con vivienda en propiedad libre de cargas o cargas que no supreren el 40% de su valor
  • 10.000€ – 300.000€: hasta el 40% del valor de la vivienda
  • Hasta 20 años para reembolsar el crédito
  • Desde el 2% TIN (3,90% TAE)  – 18% TIN (19,90% TAE)
  • Comisión de apertura desde 0,25%
  • Posibilidad de carencia inicial de 5 años
  • Firma ante notario
  • Respuesta en 24 horas 

Reunificación de deudas

Esta finalidad es la más conocida de este tipo de préstamos y es que permite a personas con varios créditos de grandes cantidades poder unificar todos los préstamos en uno solo y pagar una mensualidad más baja a la suma de las cuotas que pagan actualmente para volver a equilibrar sus finanzas.

Al contar con plazos de hasta 20 años, similares a los de una hipoteca, permiten elegir una cuota mucho más baja acorde con la situación financiera de cada uno. Aunque rebajar la cuota implicará alargar el plazo y, consecuentemente, que se generen más intereses, será una alternativa a caer en un impago o no poder hacer frente a todos los pagos.

Eso sí, siempre debemos tener presente que solo será una alternativa viable siempre que seamos capaces de hacer frente a la mensualidad, sino volveremos a estar en la misma situación que antes de reunificar los créditos. Por lo general las entidades suelen fijar el máximo de endeudamiento del 35% de los ingresos mensuales de cada particular para evitar el sobreendeudamiento y que se utilice de manera responsable.

Aceptación de una herencia

La aceptación de una herencia puede ser caro. De hecho, el coste del Impuesto de Sucesiones puede llegar a ser de varios miles de euros o incluso más de 100.000 euros según la Comunidad Autónoma y hace que muchos herederos opten por rechazar su legado por no poder hacer frente al pago del Impuesto.

Una de las características de los préstamos con garantía hipotecaria es que permiten también poner como garantía el inmueble que heredemos, por lo que podremos aceptar la herencia y pagar su coste con el préstamo con garantía hipotecaria mes a mes en vez de todo de golpe.

Además de estas finalidad, también se podrán utilizar para muchas otras como una reforma integral de la vivienda. En definitiva, la finalidad de los préstamos con garantía hipotecaria es permitirnos obtener grandes cantidades de financiación con la garantía de nuestra vivienda en propiedad. Siempre que los utilicemos de manera responsable y estando completamente seguros de poder hacer frente al pago de las cuotas, igual que cuando solicitamos cualquier tipo de financiación.