El préstamo del coche, la hipoteca, un minicrédito y un par de tarjetas. De repente nos damos cuenta de que tenemos más créditos de los que deberíamos y que reembolsar varias cuotas de diferentes créditos desequilibra nuestra economía. Si estamos pensando en reunificar todos nuestros préstamos en uno solo, debemos tener en cuenta que existen diferentes alternativas, pero que cada opción será más o menos adecuada para nosotros de acuerdo con la situación financiera en la que nos encontremos. A continuación, explicamos cuándo utilizar cada una de estas alternativas para elegir la mejor alternativa para nosotros.
Ampliar nuestra hipoteca para unificar las deudas
Si tenemos una hipoteca vigente, podremos solicitar una ampliación de esta y así cancelar el resto de deudas y pagar una única cuota. La gran ventaja de esta alternativa es que las hipotecas tienen un interés que rara vez supera el 3%, por lo que pasaremos a pagar muchos menos intereses por el resto de créditos.
Para poder optar a esta alternativa deberemos acudir al banco y será este quien decida, según su análisis de riesgo, si nos lo concede o no. Generalmente tendremos que llevar reembolsando la hipoteca algunos años y es posible que nos pidan a cambio subirnos el interés o aportar otras garantías.
Además, debemos tener en cuenta que para ampliar la hipoteca es probable que tengamos que asumir los gastos de tasación y notaría además de una comisión por la novación del contrato.
Ampliar un préstamo personal ya vigente
Si no tenemos una hipoteca vigente, también podremos probar a reunificar los créditos en uno de los préstamos personales que tenemos pendientes . Generalmente tendremos más suerte acudiendo al préstamo de mayor importe que tenemos vigente, aunque podemos probar en varios (siempre que sean préstamos y no tarjetas de crédito).
Con esta alternativa podremos también unificar todas nuestras deudas en una sola y así pagar una única mensualidad. Al igual que si ampliamos la hipoteca, será el banco quien decida si tenemos un perfil de riesgo bajo como para llevar a cabo esta operación y es posible que tengamos que pagar alguna comisión por el cambio de contrato del préstamo.
Solicitar un préstamo personal específico para reunificar deudas
Como tercera opción tenemos la contratación de un préstamo con la finalidad específica para reunificar. Este tipo de créditos son más caros que una hipoteca o un crédito al consumo, pero nos permiten reunificar todos nuestros préstamos sin problemas. En esta opción contamos con dos alternativas distintas:
Préstamos personales específicos para reunificación
Se trata de préstamos personales con la finalidad específica de unificar deudas sin hipoteca. Estos préstamos tienen un coste que ronda el 12% TAE y están pensados para unificar varios préstamos en uno.
Podremos solicitar este tipo de financiación si las deudas son menores a 30.000 euros, no hay impagos y no incluimos la hipoteca. Además, será imprescindible contar con un trabajo estable y unos ingresos que nos permitan hacer frente al reembolso sin problemas.
Préstamos con garantía hipotecaria
Si tenemos una vivienda en propiedad y nuestra deuda supera los 30.000 euros y/o aparecemos en ficheros de impagos, nuestra mejor alternativa es acudir a los préstamos con garantía hipotecaria.
Con este tipo de financiación será obligatorio contar con una vivienda en propiedad que podamos utilizar como garantía de pago para poder contratarlos. Aunque no importa si aparecemos en ficheros de impagos.
El préstamo con garantía hipotecaria Suitaprest nos permite obtener hasta un 30% del valor de nuestra vivienda, con un interés a partir del 15,71% TAE y un plazo de reembolso de hasta 20 años con posibilidad de carencia parcial durante los cinco primeros años.
Eso sí, al contratar este tipo de financiación debemos tener en cuenta que en caso de impago corremos el riesgo de perder la vivienda puesta como garantía.
Sea cual sea la alternativa a la que acudamos, antes de contratarlo debemos hacer números y conocer cuánto pagaremos cada mes, así como el total y todos los intereses generados. Además, es importante estar completamente seguros de poder reembolsar el crédito sin problemas para evitar volver a caer en un sobrendeudamiento.
Comentarios